La mitad de Bogotá seguirá confinada y habrá toque de queda nocturno

La alcaldesa Claudia López indicó que se descarta el inicio de clases presenciales en los colegios del distrito y se mantendrá el aprendizaje virtual.

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La alcaldesa Claudia López indicó que se descarta el inicio de clases presenciales en los colegios del distrito y se mantendrá el aprendizaje virtual.

El esperado retorno a las clases presenciales que estaba presupuestado para el próximo 25 de enero de 2021 en los colegios de Bogotá volvió a quedar en el limbo. Esa fue una de las medidas anunciadas por la Alcaldía de Bogotá ante el incremento de la segunda oleada de casos de Covid-19 en el país, que se ha recrudecido en la capital colombiana.

“No se volverá a clases presenciales pero se continuará con el aprendiza virtual, se seguirá aprendiendo pero desde la casa”, dijo López.

Pese a que los capitalinos acataron la medida de toque de queda durante todo el puente de reyes y se redujeron los contagios, la alcaldesa Claudia López pidió mantenerse en casa.

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En una transmisión por Facebook Live, la mandataria distrital resaltó el buen comportamiento de los ciudadanos, al tiempo que señaló que los contagios pasaron de 6.200 casos diarios de coronavirus nuevos antes del puente de reyes, a 4.200 casos diarios nuevos durante el fin de semana de confinamiento.

Dijo que como parte del reto de 2 semanas por la vida, la mitad de la ciudad seguirá con la cuarentena estricta; Usaquén, Suba y Engativá terminarán su confinamiento el domingo. Mientras que lo respectivo pasará en Kennedy, Fontibón y Teusaquillo el próximo 21 de enero.

Sin embargo, se mantendrán las medidas de restricción a la movilidad como el pico y cédula, habrá toque de queda nocturno en la capital toda la semana hasta el domingo 17 de enero de 2021, desde las 8:00 p.m. a las 5:00 a.m. y continuará la ley seca en toda la ciudad.

Pese al buen balance, la alcaldesa reportó que se presentaron nueve fiestas clandestinas en la ciudad, un número bajo, pero que bastó para llamar la atención en medio de la crisis hospitalaria que se vive por el incremento de contagios de Covid-19.

Se impusieron más de 3.700 comparendos a personas que no acataron las medidas o que estaban con el tapabocas mal puesto o sin usar. También se cerraron 52 comercios no esenciales que estaban prestando sus servicios, en desacato a las medidas de la cuarentena estricta de fin de semana.

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