Si usted tiene sus ahorros en dólar o planea invertir en divisa hay una pregunta que deberá tener en cuenta para todos sus movimientos: ¿Qué hacer cuando el dólar sube y cuando baja?
Claramente, la moneda es una aliada para la inversión que se valoriza a corto y largo plazo en todos los países de Latinoamérica, un hecho que se evidenció en el último año con la Covid-19.
Mientras las monedas de la región perdieron espacio ante el dólar, este se fortaleció, una tendencia que se acentuó con la aprobación del paquete de ayuda económica en ese país por US$1,9 billones.
Cuando se tienen dólares “lo ideal es vender caro y comprar barato. En la medida que hay una tendencia creciente uno espera comprar. Si hay expectativas de que va a caer lo mejor es vender rápido”, explica Carlos Sepúlveda, decano de Economía de la Universidad del Rosario.
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Para 2021 se proyecta que durante el primer semestre el dólar permanezca fuerte, en parte gracias a las medidas económicas de Estados Unidos, pero las tasas podrían bajar en el segundo semestre del año.
Sepúlveda recomienda que los inversionistas estén atentos a las fluctuaciones del dólar y que tengan un portafolio diversificado mediante el que puedan aprovechar las oportunidades del mercado.
Para comprar y vender dólar hay que estar atento al comportamiento de las tasas, medir los riesgos, el contexto político del país desde el que se espera hacer la transacción y también el de Estados Unidos: el inversionista siempre debe tener la mirada puesta en la Casa Blanca.
Pero la decisión también depende del tiempo que se tenga disponible para hacer las inversiones.
Como lo dice César Ferrrari, profesor del Departamento de Economía de la Universidad Javeriana, “a largo plazo el dólar siempre va a quedar ganando”.
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Es decir, si su inversión es a corto plazo y ve que el precio del petróleo está subiendo o que el gobierno empieza a endeudarse, es probable que haya cambios en la oferta y fluctuaciones marcadas en la tasa de cambio.
En esos contextos, sería pertinente decidir si le conviene vender sus dólares para obtener ganancias o comprar a bajo precio para vender en el futuro.
Y, para el caso de Colombia, el experto invita a mirar la situación del mercado petrolero del país porque se estima que a largo plazo habrá una sustitución de productos energéticos.
Esta hará que el mundo dependa menos del petróleo, un contexto que afectaría al país porque al territorio nacional entran dólares a partir de la exportación del hidrocarburo.
“Si Colombia sigue dependiendo de las exportaciones, se queda sin dólares. Eso hará que la oferta de dólares caiga y la tasa de cambio suba”, afirma Ferrari.
Finalmente, no olvide que el precio del dólar fluctuará también según la vacunación mundial contra la Covid-19, una enfermedad que evidenció otro factor determinante para el comportamiento de la divisa: la salud pública.
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