El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que la deuda de Argentina es “insostenible” y que se requiere una operación de deuda definitiva, que produzca una contribución significativa de los acreedores privados, para restaurar la sostenibilidad con alta probabilidad, según un comunicado emitido hoy.
Al final de una semana de reuniones con las autoridades gubernamentales, el personal del FMI dijo que se consideró que la deuda era insostenible porque el superávit primario necesario para reducir la deuda pública y las necesidades brutas de financiamiento a niveles consistentes con un riesgo de reinversión manejable y un crecimiento potencial satisfactorio no es económica ni políticamente factible.
El personal enfatizó la importancia de continuar un proceso colaborativo de compromiso con los acreedores privados para maximizar su participación en la operación de la deuda.
No se dijo mucho sobre las posibles modificaciones al Acuerdo Stand-By (SBA) entre el FMI y Argentina, pero se confirmó que la directora del fondo Kristalina Georgieva se reunirá con el ministro de Economía, Martín Guzmán, durante las reuniones del G-20 del 22 al 23 de febrero para discutir el tema y los próximos pasos.
El FMI señaló que su personal había considerado que la deuda era sostenible pero no con una alta probabilidad durante la última revisión realizada en julio de 2019.
El fondo dijo que los riesgos para la sostenibilidad de la deuda observados en ese momento se habían materializado a medida que continuaba la depreciación de la moneda.
El gobierno perdió importantes reservas de divisas, los diferenciales soberanos aumentaron y el PIB se contrajo más de lo esperado.
La deuda pública bruta alcanzó casi el 90 % del PIB a fines de 2019, excediendo la proyección del FMI en 13 puntos porcentuales.
El FMI dijo que las autoridades gubernamentales se han estado moviendo para abordar la difícil situación económica y social. El fondo mencionó que se están utilizando impuestos más altos para financiar en parte el aumento del gasto social, la mayoría de los cuales está dirigido a los más vulnerables.
Además, el FMI consideró que las reservas de divisas y el peso se han estabilizado, con el apoyo de controles de capital y un superávit comercial, mientras que la inflación y las expectativas de inflación han comenzado a bajar.
En general, el cálculo del FMI de que la deuda de Argentina es insostenible es importante porque mejora la influencia del gobierno en la reestructuración de las negociaciones con los acreedores privados.
Dado que el Gobierno necesita un acuerdo reestructurado con el FMI, sin importar qué evitar para evitar un incumplimiento y el fondo no aceptará extender los términos de reembolso del préstamo a menos que considere que la deuda se puso en un camino sostenible, la declaración del FMI esencialmente les dice a los acreedores privados que se preparen para cortes en la deuda y sus pagos de intereses.
Sin embargo, el FMI no agregó muchos detalles sobre lo que se necesitaría para hacer que la deuda sea sostenible, por lo que la puerta sigue abierta para negociaciones contenciosas de reestructuración.
(Reporte especial de CEE MarketWatch para Valora Analitik)
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