El equipo de investigaciones económicas del Banco de Bogotá entregó sus perspectivas sobre el comportamiento de la inflación de Colombia de cara a cierre de año. Para la firma hay un escenario que es cada vez más pesimista por mayores presiones sobre los precios de los alimentos.
Se lee en el informe que el pronóstico central de inflación de Colombia en 2022 sería del 8,6 %, con un escenario mayor del 9,8 % y uno menor que tendría frontera en el 7,8 %.
Para el equipo de investigaciones son más los escenarios a los que el país podría enfrentarse y que generarían una mayor escalada inflacionaria a cierre de año.
Entre los más importantes se tienen en cuenta: un ciclo petrolero con oferta limitada que presiona precios al alza, muy de la mano con restricciones a Rusia que también presionan el comportamiento de las materias primas.
Esto último sumado al hecho de que persistan los problemas logísticos y sean más lentos de solucionarse, así mismo como un cierre de la brecha del producto más rápida.
Mientras que, para tener una inflación más baja a cierre de año tendría que darse una rápida corrección en el precio de los alimentos.
Escenarios a tener en cuenta
De acuerdo con el informe, un recrudecimiento de la guerra entre Rusia y Ucrania decantaría en afectaciones más severas para el grueso de la economía mundial, con lo que además se pondría en riesgo el proceso de reactivación económica.
Una “inflación elevada sigue presionando las expectativas, y nuevos choques mantienen los riesgos sesgados al alza. Alimentos y energía costosos a nivel mundial podrían mejorar de forma muy lenta, pues no dependen exclusivamente de la demanda”, dice el documento.
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Lo anterior se espera decante en el eventual aumento de las tasas de interés que, para el caso colombiano, llevarían al Banco de la República a incrementar su tasa de política monetaria muy cerca del 8 % a cierre de año.
Por lo demás, y de cara a 2023, el informe también deja claro que la inflación se acercaría al rango meta del emisor, llegando a rozar el 4,1 %.
