El Gobierno de Colombia lanzó ayer una operación en los mercados internacionales con el objetivo de iniciar el pre-financiamiento de la vigencia 2019 y reducir las amortizaciones de ese año.
Con estas operaciones, según el Ministerio de Hacienda, se podrán liberar recursos en el Presupuesto General de la Nación del próximo año para destinarlos a gastos de inversión.
La transacción consistió en la colocación de un nuevo bono global denominado en dólares por US$1.500 millones con vencimiento en 2029, además de la reapertura del bono global con vencimiento en 2045 por US$500 millones y una recompra del bono global con vencimiento en marzo 2019 por US$1.000 millones.
La emisión alcanzó una demanda máxima cercana a US$9.700 millones, la más alta en la historia de colocaciones de deuda externa ejecutada por la Nación, dijo el Ministerio de Hacienda.
En principio, la Nación había considerado enfocarse en el bono de 10 años para reemplazar su referencia en ese sector de la curva.
Sin embargo, ante la demanda y la solicitud de muchas de las cuentas por aumentar su exposición a largo plazo, se decidió ofrecer al mercado la reapertura del bono global 2045.
“Algo muy importante es que parte de la transacción fue hacer una recompra por US$1.000 millones de los bonos del 2019, lo cual quiere decir que estamos retirando $3 billones de amortizaciones de deuda del próximo año, para abrir espacio precisamente para los montos de inversión del proyecto del Ley de Presupuesto”, dijo viceministro de Hacienda, Andrés Pardo.
Frente a las condiciones financieras de la colocación, el bono global con vencimiento en marzo de 2029 se emitió con un cupón de 4.50% y una tasa de 4.578%, correspondiente a un diferencial sobre los Tesoros de los Estados Unidos de 140 puntos básicos, el cual representa el diferencial de riesgo más bajo alcanzado en emisiones a 10 años desde enero de 2013.
Por su parte, la reapertura del bono a 30 años logró una tasa de 5.184%, equivalente a un spread sobre los Tesoros de los Estados Unidos de 185 puntos básicos, convirtiéndose también en el spread más bajo en una emisión a 30 años desde octubre de 2014.
En cuanto a la operación de manejo de deuda, se ejecutó una oferta de recompra por US$1.000 millones de los bonos con vencimiento en marzo 2019, lo cual permite suavizar el perfil de vencimientos y reducir los riesgos de refinanciación.
Considerando la emisión, la recompra y las deducciones por comisiones y pago de intereses acumulados, la Nación contará con recursos de pre-financiamiento de la vigencia 2019 por un monto aproximado de US$954 millones.