La tenencia de mascotas en los hogares colombianos se ha convertido en una práctica cada vez más común. Perros y gatos no solo cumplen una función de compañía, sino que, en muchos casos, son considerados miembros de la familia. Esta tendencia refleja un cambio cultural en la forma en que las personas se relacionan con los animales, otorgándoles un rol relevante dentro del núcleo familiar.
Sin embargo, algunas familias en Colombia también han optado por tener como mascotas especies que, aunque pueden parecer inofensivas o adaptables al entorno doméstico, en realidad están protegidas por la legislación ambiental. La normativa colombiana prohíbe la tenencia de animales silvestres como tortugas, loros, iguanas, boas constrictor, entre otros, debido al impacto negativo que esta práctica tiene sobre los ecosistemas y al fomento del tráfico ilegal de especies.
De acuerdo con la legislación vigente, mantener en cautiverio a este tipo de animales constituye una infracción ambiental. Estos seres cumplen funciones ecológicas clave y deben permanecer en su hábitat natural para garantizar el equilibrio de los ecosistemas. En ese sentido, el Ministerio de Justicia y del Derecho ha enfatizado que tener animales silvestres como mascotas es ilegal.
¿De cuánto es la multa por tener uno de estos animales como mascota?
La Ley 1801 de 2016, también conocida como el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, establece sanciones para quienes incurran en esta práctica. Según lo estipulado, la tenencia de fauna silvestre en el hogar puede acarrear una multa tipo 3, equivalente a $393.440. Además de la sanción económica, las autoridades procederán al decomiso del animal, el cual será entregado a una entidad ambiental competente para su recuperación y posterior liberación o reubicación.
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Frente a estas situaciones, la ciudadanía puede actuar. Si un vecino o conocido tiene en su poder un animal silvestre como mascota, es posible presentar la denuncia correspondiente a través de la línea 123. Al recibir el reporte, agentes de la Policía Nacional visitarán el lugar para verificar la información y constatar el estado del animal. Si se confirma la tenencia ilegal, se impondrá la multa correspondiente y se efectuará el decomiso.
Es importante señalar que mantener animales silvestres en condiciones domésticas puede provocarles sufrimiento tanto físico como emocional. Al ser retirados de su entorno natural, estos animales pierden la posibilidad de desarrollar comportamientos propios de su especie, lo cual afecta directamente su bienestar. Aunque algunas personas creen ofrecer cuidados adecuados, lo cierto es que, en muchos casos, estos animales son mantenidos en espacios reducidos, lo que limita sus capacidades físicas y cognitivas.
