El Gas Licuado de Petróleo (GLP), el mismo combustible que se distribuye entre millones de hogares mediante cilindros o pipetas, juega un rol fundamental en la matriz energética del país, especialmente dada la situación actual de apretón para la exploración en que se basa el abastecimiento con el gas natural.
De ahí que la Asociación Gremial Colombiana de Comercializadores de Gas (Agremgas) haya lanzado un llamado para explorar todas las oportunidades que se abren para este combustible como una alternativa viable para diferentes tipos de usuarios.
Lo hizo en la jornada inicial del 4to. Summit Internacional de GLP de Agremgas, que se celebra los 5 y 6 de junio en el Hotel Hilton Garden Inn de Barranquilla, donde Valora Analitik está presente como medio aliado.
“El GLP encuentra unos vacíos para garantizar la confiabilidad energética a los usuarios, no solamente residenciales, sino que estamos hablando de usuarios comerciales, industriales y térmicos también”, destacó Sara Vélez, directora ejecutiva de Agremgas, señalando que para la mayoría de esos usuarios la inversión para hacer el cambio de gas natural a GLP es “muy baja”.
“El GLP sigue teniendo confiabilidad –añadió–, sigue teniendo abastecimiento. Por eso hablamos de oportunidades y la situación de gas natural por la que está atravesando el país, aunque es lamentable, desde el sector de GLP es una oportunidad y creemos que nosotros podemos explorar y aprovechar esas oportunidades que se están abriendo para poder atender a los usuarios”.
El gas natural se ha venido importando desde 2016, solo que últimamente se ha hecho más evidente por la afectación en los precios a los usuarios residenciales. Ello también le ocurre al GLP, pero hay una diferencia fundamental, los precios.
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“Los análisis que nosotros hemos hecho es que el gas natural importado es mucho más costoso que el GLP importado. Entonces, por eso nosotros hablamos de una oportunidad para el GLP, que puede brindar confiabilidad a los usuarios”, expuso la presidenta de Agremgas.
Deuda en subsidios
Vélez manifestó que el Estado mantiene una deuda aún con el sector del gas GLP de $40.000 millones, luego del pago de las vigencias atrasadas hasta enero de 2025. “Es un oxígeno que nos da y que nos sirve para mantener los subsidios a los usuarios que estamos atendiendo”.
Sin embargo, aún se debe de febrero a mayo de 2025, lo que da un monto mensual adeudado de $9.000 millones al mes en subsidios que están dirigidos a usuarios de estratos 1, 2 y 3, a comunidades indígenas en seis departamentos. “Eso es como un taxímetro”, dijo Vélez. Según indicó, mantienen abierto el diálogo con el Ministerio de Minas para acordar un calendario de pagos.
El GLP atiende aproximadamente 3,4 millones de usuarios, lo que se traduce en unos 12 millones de colombianos. Es un combustible que llega a todo el país, pero especialmente a esos lugares de difícil acceso. Los departamentos donde más se consume son Cundinamarca, Bogotá, Antioquia, Valle del Cauca y Nariño.
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