En el contexto económico colombiano, la promoción de la iniciativa empresarial emerge como un motor fundamental para el desarrollo local.
Así lo afirmó Imelda Restrepo, vicepresidente de desarrollo económico y competitividad de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), quien subrayó la importancia de fortalecer el tejido empresarial para dinamizar las economías regionales y generar bienestar social, en alianza con el sector público.
“Estamos en un contexto turbulento a nivel regional, nacional y global, pero definitivamente hay que buscar oportunidades y hay que seguir invirtiendo y confiando en el país”, destacó en conversación con Valora Analitik en el marco del Foro de Desarrollo Local 2015 de la OCDE, que se realiza en Barranquilla.
A la par, la representante gremial expuso que la creación y consolidación de empresas no solo impacta en la generación de empleo, sino que también contribuye a la diversificación productiva y la innovación en los territorios.
Según su visión, el emprendimiento es un catalizador que permite aprovechar las ventajas comparativas de cada región, impulsando cadenas de valor que articulan a pequeños productores, industrias y servicios locales.
“El desarrollo local requiere de un ecosistema empresarial robusto, capaz de adaptarse a los cambios y de responder a las necesidades de los mercados, tanto nacionales como internacionales”, señaló Restrepo.
Así las cosas, “la competitividad y el desarrollo empiezan por las regiones y se esparcen por todo el país”, añadió.

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Retos y oportunidades
Entre los principales retos, identificados por el gremio y señalados en uno de los paneles del evento sobre desarrollo local e iniciativa empresarial, se encuentran el acceso a financiamiento, formación y talento humano y a mejora en Infraestructura y conectividad.
No obstante, Restrepo enfatiza que las oportunidades superan los desafíos, especialmente cuando existe articulación entre el sector público, privado y la academia. Esta colaboración es esencial para crear políticas que incentiven la formalización, la innovación y la internacionalización de las empresas locales.
La ANDI ha implementado diversas iniciativas orientadas a fortalecer la competitividad regional, tales como programas de acompañamiento empresarial, redes de mentoría y espacios de articulación sectorial.
Restrepo resalta que estos esfuerzos buscan no solo incrementar la productividad, sino también fomentar una cultura empresarial orientada al desarrollo sostenible y la inclusión social.
“La empresa es el vehículo por excelencia para transformar realidades locales y construir futuro”, concluyó Restrepo, invitando a todos los actores económicos a sumar esfuerzos en la construcción de territorios más prósperos y equitativos.