Entrevista | Alquería presenta resultados de sus apuestas en 2025 y revela grandes proyecciones para los próximos años

Alquería contó que las iniciativas, más allá de permitirles obtener cifras positivas durante el 2025, impulsaron el crecimiento, rentabilidad y sostenibilidad.

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El sector lácteo en Colombia después de la pandemia ha estado rodeado de diversos retos que obligan a que las empresas se reinventen con estrategias para mantenerse vigente, respondiendo a las nuevas tendencias de consumo.

Precisamente para Alquería, temas como el consumo, el productor y la confianza del consumidor, que fueron los más afectados, están viendo una recuperación sostenida, todo con relación al propósito de la compañía y las acciones que han venido liderando.

Foto: Rafael Álvarez, CEO de Alquería
Foto: Rafael Álvarez, CEO de Alquería

Para eso, Valora Analitik conversó con Rafael Álvarez, CEO de Alquería, quien contó como las iniciativas, más allá de permitirles obtener unas cifras positivas durante el 2025, han impulsado el crecimiento, rentabilidad y sostenibilidad de la empresa B más grande de Colombia.

Asimismo, mencionó la diversificación de su portafolio, las expectativas que tienen del negocio para el próximo año y, a mediano plazo, las proyecciones para seguir consolidándose como una de las compañías más completas del sector con impacto social y ambiental.

¿Cuál es el balance de Alquería para el cierre de 2025? 

Cerramos 2025 con un balance muy positivo. Hace cinco años nos planteamos duplicar el tamaño del negocio y hoy podemos decir que lo logramos: proyectamos finalizar el año con ventas cercanas a los $2 billones.

Pero más allá de la cifra, lo más importante es cómo lo hicimos: guiados por nuestro propósito de nutrir el futuro, transformando sueños en realidades. Eso nos llevó a diversificar nuestro portafolio, fortalecer nuestras marcas y evolucionar hacia una compañía de alimentos más robusta, rentable y sostenible, que crece generando impacto social, ambiental y desarrollo para el país.

¿Cómo están respondiendo a las nuevas tendencias de consumo?

Nuestro propósito nos inspiró a convertirnos en una compañía de alimentos multimarca y multicategoría, porque sabemos que la nutrición que necesitan hoy las familias va mucho más allá de la leche y está mediada, además, por diferentes tendencias de consumo.

Esta visión se materializa en decisiones concretas como la adquisición y el fortalecimiento de marcas como Quesos Del Vecchio y Vitad.

Quesos Del Vecchio hoy vende cuatro veces más que hace cuatro años, y Vitad multiplicó por cuatro su volumen en su primer año con Alquería. Estos resultados muestran que el mercado responde positivamente a propuestas de valor que combinan nutrición, bienestar y sostenibilidad. 

¿Qué significa que Alquería sea la Empresa B más grande del país?

Significa que estamos demostrando, con hechos, que propósito y rentabilidad no compiten: se potencian. Ser Empresa B implica medir el impacto social y ambiental con la misma rigurosidad que los resultados económicos.

En Alquería el impacto positivo se concreta a través de cuatro causas que movilizan nuestro propósito superior: mantener el campo siempre vivo para asegurar la calidad y continuidad de nuestras materias primas, dar larga vida al planeta para garantizar entornos sanos que permitan crecer al negocio, nutrir nuestro presente y futuro para contar con una población saludable que nos elija y prospere con nosotros, y mejorar la educación pública para transformar realidades, porque la educación es el mayor motor de progreso.

Las llamamos causas, no objetivos o metas, porque queremos convocar a otros para que se unan, dado que son temas en los que todos deberíamos trabajar como país.   

¿Cómo están viendo el 2026?

Vemos el 2026 con optimismo responsable. Nos estamos proyectando con un crecimiento a doble dígito, pero sobre todo con la misma ambición de multiplicar nuestro impacto social y ambiental.

Sabemos que, como cada año, encontraremos retos, cambios e incertidumbres, pero también grandes oportunidades. Y tenemos una convicción clara: vamos a seguir creciendo no solo en tamaño, sino en relevancia, encontrando siempre la mejor forma de adaptarnos, innovar y responderle al país y a las familias colombianas que confían en nosotros.

Alqueria
Alquería. Foto: cortesía Alqueria

¿Qué retos identifican en el sector lácteo?

El primer gran reto es el consumo. Después de la pandemia, el consumo per cápita de lácteos en Colombia cayó. Hoy se ha venido recuperando y estamos alrededor de los 150–154 litros por persona al año, pero seguimos lejos de los 180 litros que recomienda la OMS. Y esto no es solo un desafío para las empresas, es un reto país: la nutrición de los colombianos, especialmente de los niños en etapa de desarrollo, depende en buena parte de cerrar esa brecha.

El segundo gran reto es el origen, el campo. Hoy el productor promedio tiene cerca de 60 años, y eso nos obliga a trabajar con urgencia en relevo generacional. Debemos seguir brindándoles herramientas, formación, tecnología y modelos de acompañamiento que mejoren su productividad y su calidad, para que pasen de una economía de subsistencia a una visión empresarial del campo. Solo así las nuevas generaciones podrán ver la ruralidad como un proyecto de vida y no como un lugar del que hay que salir.

Y el tercer reto es la confianza del consumidor. La industria tiene la responsabilidad de responder con productos lácteos de alta calidad, seguros, nutritivos y accesibles. Porque si la gente confía en nosotros, no podemos fallarle: tenemos que ser coherentes desde el origen hasta la mesa de las familias colombianas, entregándoles lácteos de calidad.

¿Ustedes cómo garantizan entonces la calidad de la leche?

En Alquería la calidad es un compromiso con la confianza de las familias colombianas: es parte de nuestro ADN.

En la última década hemos recibido más de 90 reconocimientos por nuestras plantas y completamos 24 años consecutivos con la certificación internacional Quality Chekd, un sello que muy pocas compañías en el mundo han sostenido por tanto tiempo.  La calidad no se controla: se construye todos los días. 

Nuestro compromiso con la excelencia se desarrolla constantemente; en el camino puede haber obstáculos o incidentes aislados, pero eso no puede distraernos de nuestra convicción fundacional: un vaso de leche, un vaso de salud. Y esa convicción sigue viva. Por eso, desde hace más de una década venimos apoyando activamente los esfuerzos del país para erradicar la adulteración de la leche.

Además, hemos participado en diferentes espacios técnicos del Invima para entender este flagelo, poniendo a disposición la experiencia que hemos adquirido gracias a nuestros laboratorios, donde realizamos más de 1,3 millones de análisis al año, contribuyendo así a mejorar los controles sobre la calidad y la inocuidad.

Por eso también, como lo hemos dicho públicamente, celebramos la Resolución 2270 de 2023, que finalmente definió la línea base para el control efectivo de esta mala práctica. Porque la calidad no es negociable: los consumidores que compran leche tienen derecho a recibir 100 % leche.

¿Qué proyecciones tienen de aquí al 2030?

En Alquería nos gusta soñar en grande, porque soñar pequeño gasta las mismas calorías. Por eso, de aquí al 2030 nos hemos propuesto volver a duplicar el tamaño del negocio.

Pero ese crecimiento no es solo en ventas. Queremos hacerlo fortaleciendo nuestro portafolio, llegando a más hogares y evolucionando como una compañía de alimentos cada vez más completa. Y, al mismo tiempo, multiplicando nuestro impacto positivo a nivel social y ambiental. Porque para nosotros crecer no es solo ser más grandes, es ser más relevantes para el país, para el campo, para las familias colombianas y para las próximas generaciones.