El presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP), Frank Pearl, en el marco del IV Foro de Hechos de Sostenibilidad, describió algunas de las preocupaciones que ha identificado el gremio, que están afectando el desarrollo del sector, y qué se necesita para ponerles freno.
“Las empresas de hidrocarburos están entre la espada y la pared: entre un Estado que es ineficiente, corrupto, que no existe o no funciona, y unos grupos de interés y unas comunidades que -ante la falta de presencia del Estado- les exige a las empresas que lo sustituyan y resuelvan todos sus problemas”, sentenció Pearl en la apertura del foro.
Agregó: “hemos entrado, creado y promovido unas dinámicas de relacionamiento demasiado económicas, cortoplacistas y utilitaristas. El chantaje de los grupos de interés y de las comunidades no puede continuar sin la protección del Estado”.
Para Frank Pearl, este es un camino que no tiene salida buena para nadie. “Tenemos que poner límites, tenemos que estar dispuestos a tener una corresponsabilidad, pero debemos pararnos ante un Estado y ayudar y tallarle para que cumpla su función: para que proteja al empresariado y a los ciudadanos; para que proteja el derecho al trabajo y pararnos de frente ante las mafias”.
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El líder gremial añadió que el país no debe aceptar “más chantajes que impiden el funcionamiento de este y otros sectores”.
Según Pearl, para que Colombia pueda avanzar es necesario que se pongan límites “Hay que premeditar, en unos diálogos genuinos, tener un genuino interés en el otro y una verdadera visión de cómo podemos transformar los territorios”.
Diálogo y refuerzo de las instituciones, pide la ACP
El presidente de la ACP manifestó, además, que ahora al adelantar los diálogos debe estar dispuesto escuchar: “necesitamos instituciones que trasciendan los ciclos políticos y plan es que nos permitan ir más allá de las coyunturas y de los negocios”.
Sumó: “aquí tenemos un reto adaptativo. Los colombianos tenemos que hacer un alto en el camino, hacer una reflexión y pensar cuáles son los valores y conductas que hemos traído hasta hoy y desechar lo que no nos sirve”.
“Tenemos que ver cuáles los valores y conductas que tenemos que modificar y cuáles son los valores y conductas que tenemos que incorporar dentro de nuestro ADN para transformar esta sociedad”, señaló el líder gremial.
Destacó también que parte del papel del empresariado es ser garante de la legitimidad. “Impulsando articulaciones entre los gobiernos locales, nacionales y regionales, entre los grupos sociales y contribuir a forjar políticas públicas no con base, exclusivamente, en los propios intereses, sino basados en la evidencia para buscar el interés general”.
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Para lograr lo anterior, Pearl aseguró que se necesitan incorporar en el ADN empresarial el fortalecimiento de temas que tienen que ver con la democracia, equidad, inclusión, transparencia y la rendición de cuentas.
“Colombia tiene oportunidad de hacer una transición, una institucional, de tener un país técnica y financieramente viable. Colombia tiene hoy, en un momento en el que no creemos casi que en nada, una oportunidad de oro para reflexionar cuál es el papel de la ciudadanía y del empresariado. Si uno decide hacer empresa en este país no puede ser espectador, tiene que meterse a forjar y transformar las instituciones”, indicó Frank Pearl.
Y añadió que “esta transición está en nuestras manos. Quiero dejarlos con una pregunta: ¿De qué me voy a apropiar yo?”.