A comienzos de septiembre, se conoció la alianza entre Andrés Julián Rendón y Eugenio Prieto para la Gobernación de Antioquia. Luego de dos encuestas internas decidieron que el primero, que tiene el aval del Centro Democrático, fuera el candidato en esta coalición.
Esto, porque mientras que Eugenio Prieto, en las mediciones, quedaba de segundo, Rendón lograba el empate técnico con Luis Pérez, quien quiere repetir en la gobernación. Algo que podría haber cambiado recientemente, luego de que Rendón anunciara que es fórmula con Federico Gutiérrez, el más opcionado de los candidatos para ser alcalde de Medellín.
Valora Analitik conversó con Andrés Julián Rendón sobre su campaña a la gobernación. Desde su sede política en el sector de Las Palmas, en Medellín, el exalcalde de Rionegro (2015 – 2019) habló sobre esas alianzas. También, explicó en detalle varias de sus propuestas, que pasan por la infraestructura, la conectividad y la seguridad en distintos frentes, y por convertir a EPM “en un motor para Medellín y Antioquia”.
Ya tiene la alianza con Eugenio Prieto, ¿ha tenido conversaciones con otros candidatos como Luis Fernando Suárez?
Yo siempre he tenido un ánimo de unidad. De los 10 gobernadores antioqueños elegidos popularmente, solo dos han ganado por cuenta propia: Sergio Fajardo y Luis Alfredo Ramos. A los demás les ha tocado construir una coalición muy amplia y yo no seré la excepción. Pero lo perfecto es enemigo de lo posible. Lo posible y lo mejor que pudo pasar fue juntarnos con Eugenio. En las encuestas no solo permitieron consolidar la unión sino por la fotografía que revelaron: quedé peleando el primer puesto en un empate técnico.
¿Y con Juan Diego Gómez y Mauricio Tobón?
Las puertas para construir alianzas y una gran coalición están abiertas, pero hay que tener en cuenta esta fotografía.
Recientemente anunció la fórmula con Federico Gutiérrez, ¿cómo llega a ese acuerdo y qué significa esa alianza?
Federico me ayudó a resolver un problema técnico en Rionegro de más de medio billón de pesos. EPM compró la empresa local de servicios públicos, y se está construyendo la planta de tratamiento residuales. Recientemente le pregunté por qué y me dijo que eso es lo que debió empezar a hacer EPM hace años: mercar para la casa. Así que la ilusión que con Federico en alcaldía y yo en gobernación convertiremos a EPM en un motor de desarrollo para Medellín y el departamento.
¿Y en el hipotético caso de que Federico Gutiérrez no llegara a la elección?
Ese resultado parece muy improbable, pero siempre he sido de un criterio: el trabajo institucional respetuoso. Es como cuando me preguntan cómo será la relación con Petro: respetuoso, institucional, pero nunca arrodillado. Entre otras cosas, porque un gobernador tiene que asumir su competencia y funciones.
Pero ¿cómo tendrá esa interlocución con Petro? Cómo entraría a trabajar con él, porque hay temas del orden local que también llegan a lo nacional.
En Colombia, a diferencia de otros países, las relaciones gubernamentales, incluso las finanzas, están bastante arregladas por la constitución y la ley. Aquí no pasa que, si un presidente siente que un alcalde o gobernador no es de sus afectos, le puede quitar transferencias. La relación será respetuosa, pero nunca arrodillada. Aquí hay unos intereses para defender. Por eso de la mano de Federico detendremos el saqueo que se gestó en Medellín y evitar que ese desastre que pasó de la mano de un secuaz de Petro, como lo es Daniel Quintero, se esparza en Antioquia.
¿Qué temas claves ve para el departamento?
Nos corresponderá aliviar los tres dolores más grandes: inseguridad, apelando al valor de soldados y policías, motivando a la Fuerza Pública y asumiendo consecuencias propias del gobernador, tumbando casas de vicio, con unos 10.000 frentes de seguridad civiles, pero no armados para que la prontitud de la reacción de la Fuerza Pública sea oportuna.
Nos toca derrotar el hambre. Tenemos 2 millones de antioqueños con hambre. Para ello, universalizar el programa de alimentación escolar (PAE), que tengan 2 comidas al día los 365 días del año. Y a los 500.000 mayores que envejecieron empobrecidos, entregarles una pequeña pensión para que compren la canasta básica. Y aliviar el dolor de las mujeres, que son violentadas y maltratadas. Hay que liberarles horas de cuidado a las mujeres para que puedan estudiar, trabajar, emprender, para que ganen autonomía económica.
Esos dolores toca aliviarlos urgentemente, pero sin dejar de tramitar lo importante: levantar la infraestructura vial, la educativa, la conectividad digital. Pero hay que ser imaginativos, porque las rentas propias del departamento van en franco declive y la apuesta del departamento fue Hidroituango, pero ya sabemos qué pasó.
¿Qué medidas hay en ese “ser imaginativos”?
Nos toca ser imaginativos, porque la plata está escaza. Por ejemplo, a la par de pavimentar un kilómetro de vía en Antioquia, hay que llevar miles de kilómetros de fibra óptica y conexión a la ruralidad dispersa.
Nos toca reducir gastos de funcionamiento. El departamento se gasta 900.000 millones en eso, un tercio en gasto de personal. Eso es una vergüenza. Nos toca echar mano del IDEA. Que haga cierres financieros en las obras donde puede haber concurso de privados, como en la doble calzada Los Embalses, en la conexión del sur del Valle de Aburrá hasta el Oriente, y en la conexión de Pacífico 1 con Pacífico 2.
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Menciona la participación privada, ¿de qué forma trabajará con los empresarios para el desarrollo económico de Antioquia?
Quiero convocarlos para derrotar el hambre. Cuando los tributos van a una bolsa con un propósito específico, la gente paga voluntariamente. Tomaré el tributo más importante, el impuesto particular, y lo pondré en un patrimonio autónomo, donde el único propósito sea universalizar el PAE y la atención a los mayores vulnerables.
Nos toca generarles mucha confianza a los empresarios, porque Antioquia tiene que ser el meridiano de la democracia. Y hacer inversiones en bienes públicos (seguridad y vías) que generen inversiones de empresarios.
¿Cuál es su plan para puertos como Puerto Antioquia, Pisisí y el Darien International Port?
Las ciudades pueden catapultarse por ser puerto. El Urabá antioqueño es la tierra prometida. Está en nosotros que se parezca menos a Buenaventura y más a Barranquilla. Para que se consolide hay que hacer una gran inversión de infraestructura vial. Tenemos 28.000 kilómetros de vías, y las únicas medio buenas son las 2.000 nacionales y porque concurrió la inversión privada. Por eso hablo de que el IDEA haga cierres financieros.
¿Y qué hará con el Tren del Río y, hablando de conectividad, con el sistema ferroviario en Antioquia?
Mitad de los habitantes del norte del Valle de Aburrá trabajan en Medellín o el sur, y es un suplicio para ellos ese viaje. Necesitamos el Tren del Río urgente. Pero me da pesar que esas inversiones sean tan dependientes del Gobierno Nacional, porque estas ciudades pueden ser absolutamente autónomas para esto. Hay que echar mano de todo lo que se pueda echar respetando el principio de justicia tributaria.
¿Qué pasará durante su gobierno con Hidroituango? ¿Mantendrá la postura de Gaviria de que EPM deje de su participación en la hidroeléctrica?
Es una buena idea, pero extemporánea. Antioquia habría tenido un desenlace diferente si el gobernador hubiera asumido el liderazgo que le correspondía. Pero en últimas el mayor problema no fue la calamidad natural, sino tener a Daniel Quintero como alcalde. Por eso es tan importante que Federico sea alcalde. Con él, en muy corto tiempo funcionará la totalidad del proyecto, lo que implicará que genere recursos suficientes, no solo para reparar el sobrecosto, sino para que le entre plata al departamento y a EPM.
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La Junta de EPM es dirigida por el alcalde, ¿cómo conseguirá entonces que EPM mire más a las subregiones de Antioquia?
Esa es una discusión que se da en la junta, que toma un direccionamiento estratégico. En el mandato de Federico se privilegió esto. Entonces esa es nuestra ilusión con él. Que, con él como alcalde, EPM sea un motor de desarrollo de Medellín y de Antioquia.
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