El Gobierno de Argentina espera que el Producto Interno Bruto (PIB) real permanezca sin cambios en 2019, lo que significa que elevó su pronóstico en 0,5 %, en comparación con la contracción del 0,5 % proyectada en el presupuesto de 2019, según un documento publicado de forma reciente en la web del Ministerio de Economía.
Dijo que habrá un arrastre estadístico negativo de 3 % debido a la profundización de la recesión en el segundo semestre de 2018, pero prevé que la economía se desempeñe lo suficientemente bueno para compensarlo.
El desempeño positivo estará totalmente vinculado al comercio exterior, ya que se prevé que las exportaciones crecerán rápidamente y se espera que las importaciones disminuyan, mientras que otros componentes contribuyen negativamente.
El pronóstico mejoró con respecto a la recesión anticipada en el presupuesto, principalmente porque ahora se espera que el consumo privado caiga solo 0,9 % año a año (a/a) en lugar de 1,6 %.
El pronóstico de crecimiento de las exportaciones para 2019 se redujo a 16,3 % a/a de 20,9 %, pero sigue siendo mucho más optimista que el crecimiento de 12,7 % proyectado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El pronóstico para las importaciones se revisó a la baja en 5,2 % a una contracción de 2,7 % a/a de la estimación de crecimiento anterior de 2,5 %.
Parece que estas revisiones se anularon mutuamente en términos de su efecto sobre la balanza de pagos, ya que el gobierno aún proyecta el déficit de cuenta corriente en el 2 % del PIB.
Las previsiones de inversión y consumo público también se revisaron para peor, ya que se proyecta que la inversión caerá un 10,5 % (frente al 9,7 %) y el consumo público un 4,6 % (frente al 3,4 %).
En general, al predecir una economía plana en 2019, el Gobierno tiene el pronóstico del PIB más optimista por un amplio margen.
La mayoría de las instituciones internacionales espera que el PIB se contraiga entre 1,5 % y 1,9 % este año, mientras que el consenso entre los analistas locales es que la disminución será de 1,2 %.
La administración de Macri ha sido demasiado optimista con sus pronósticos macro en cada uno de los últimos tres años, por lo que se justifica el escepticismo acerca de la nueva proyección.
El incumplimiento del pronóstico del PIB no debe poner en peligro el objetivo de consolidación fiscal porque el gobierno supuestamente tiene medidas de salvaguardia listas en caso de que la economía se contraiga entre 1,6 % y 1,7 %.
(Reporte especial de CEEMarketWatch para Valora Analitik)
