De acuerdo con los datos publicados por el Banco de Italia, el crecimiento de la deuda incobrable (ajustado por los acuerdos de titularización) se aceleró a 6,1% en noviembre de 2018 desde el 6% que había mostrado en octubre del mismo año.
Por su parte, el crecimiento no ajustado, que explica los efectos de las operaciones de titularización, bajó a -25,3% en el penúltimo mes de 2018 desde el -24,3% que había mostrado un mes atrás. Por lo tanto, el saldo de la deuda incobrable se redujo a 117.500 millones de euros, el nivel más bajo desde agosto de 2012, gracias a los esfuerzos de reducción de realizados por los bancos.
Por ejemplo, la exposición a la deuda incobrable neta de provisiones y amortizaciones, que afecta a las provisiones futuras para pérdidas crediticias, se redujo a 37.500 millones de euros, que es solo el 43% de la cifra revelada en diciembre de 2016.
De acuerdo con CEEMarket Watch “los problemas estructurales con deuda incobrable en Italia persisten, ya que la tasa de crecimiento ajustada de la deuda incobrable se mantiene bastante alta en 6,1%”.
(Reporte especial de CEEMarketWatch para Valora Analitik)
