Un 3,2 % es la cifra de inflación esperada para 2019 y 2020 sin grandes efectos por la llegada del fenómeno de El Niño en el primer trimestre de 2019.
Así lo dijo hoy Juana Téllez, jefe de investigaciones económicas del banco español BBVA en Colombia.
El banco considera que la nueva canasta del Índice de Precios al Consumidor podría generar una leve caída en su variación debido al menor peso que tendrán los alimentos.
Con base en ello, dijo que el Banco de la República deberá tomar en cuenta una demanda débil y una inflación controlada lo cual haría que no se muevan pronto las tasas de interés.
Sin embargo, la Junta del emisor deberá prestar atención al déficit de la cuenta corriente que se ampliará este año hasta 4,1 % del PIB en 2019 desde 3,5 % en 2018. Para 2020 la previsión es de un déficit de 3,8 % del PIB.
Téllez estima que la primera subida de tasas del banco central será hacia mitad del presente año en julio y hacia finales de año en diciembre.
De su parte, el analista del BBVA, Alejandro Reyes, estima que el dólar en Colombia registre niveles de $3.100 en el primer semestre del año. El promedio esperado para 2019 es de $3.137 y el precio de cierre de $3.150.
Para 2020, dijo, el dólar podría arrojar un promedio de $3.088 y un precio de cierre de $3.020.
A pesar de ello dijo que el dólar de largo plazo estimado por el banco para Colombia es de $2.900.
En la segunda parte del año advierte que el Gobierno deberá mostrarles a los mercados que tiene solución para los problemas fiscales de 2020, lo cual podría presionar la tasa de cambio.
Esa estimación se basa en que se esperan menos flujos de capitales durante el presente año en medio de un mercado más volátil y con mayor percepción de riesgo.
Ley de Financiamiento
Sobre la recién aprobada ley, Juana Téllez dijo que el recaudo no va a ser suficiente para cubrir el déficit y espera recortes de gastos del Gobierno en 2019.
“Hay incertidumbre fiscal”, dijo tomando como base que aunque la ley rebajó los impuestos a las empresas y no recaudará el IVA por la importación de bienes de capital.
A pesar de ello, no espera que el país pierda el grado de inversión en los próximos años.
