De acuerdo con información suministrada por Rystad Energy, son muy pocas las compañías en EE. UU., dedicadas a la explotación de petróleo de esquisto bituminoso, capaces de sobrevivir a los bajos precios actuales.
Según la firma citada, la mayoría de esas compañías obtiene, en promedio, menos de US$30 por barril. Lo que no alcanza para cubrir los costos de conversión y responder a los dividendos destinados a los accionistas.
Esos productores ya están trabajando con empresas de reestructuración, con la esperanza de llegar a acuerdos con los acreedores, dijeron personas familiarizadas con el asunto, y otros están verificando el valor de sus coberturas, un medio de fijar los precios para la producción futura.
Los analistas consultados estiman que en estas condiciones muchas de esas pequeñas productoras saldrán del mercado.
La mayor parte de la producción de esquisto de EE. UU. está “en riesgo con los precios actuales del petróleo” y es probable que los nuevos proyectos de perforación “se suspendan con relativa rapidez”, dijo Artem Abramov, jefe de investigación de esquisto del investigador Rystad Energy.
Parsley Energy es uno de los pocos que puede cubrir sus costos con petróleo en los US$30. Pero, eso no es lo suficientemente bueno.
“Una cantidad limitada de actividad podrá continuar”, dijo Matt Gallagher a Reuters, director ejecutivo de Parsley Energy, quien estima que “los niveles de actividad probablemente disminuirán un 50% más”.
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