Reina Irene Mejía Chacón, vicepresidenta ejecutiva del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), considera que las MiPymes lideradas por mujeres en América Latina y el Caribe son el presente y futuro de la reactivación económica de la región.
Mejía conversó con Valora Analitik sobre la situación de esta población en las empresas latinoamericanas. La vicepresidenta expresa que es momento de entrenar a las mujeres en habilidades para que puedan reincorporarse a la fuerza laboral.
¿Qué brechas de género se encuentran las mujeres al momento de crear empresa?
“En la región existe una brecha de financiamiento entre hombres y mujeres de US$91.000 millones. A siete de las empresas lideradas por mujeres que buscan financiamiento se los niegan, aún cuando tienen retornos más altos que las compañías dirigidas por hombres. La pandemia sacó a flote diferencias de habilidades, por ejemplo, en la parte digital. Por eso, tenemos que reactivar, repensar y reperfilar las habilidades de las mujeres”.
¿Está en manos de quién repensar esas habilidades?
“Todos tenemos qué hacer: el banco facilita, las empresarias se enfocan y el Gobierno posibilita la formalización de estas compañías, agilizando su certificación. De las empresas lideradas por mujeres, el 11 % exporta y el 63 % ha mostrado interés en hacerlo. Estamos apoyando el financiamiento para entrenarlas a través de Laboratoria, también lanzamos el primer bono de género, fondos que serán destinados exclusivamente para organizaciones que incentivarán la inversión en empresas dirigidas por mujeres y en aquellas que tengan políticas de género”.
Hablando de ese 63 % interesado en exportar, ¿qué pasos necesitan dar para salir al mercado internacional?
“Lanzamos el programa Creciendo Juntas en las Américas para apoyar a las mujeres y sus organizaciones en mentoría, asesoría de expertos, entrenamiento y certificaciones. Tenemos Mujeres Connectamericas, red con más125.000 empresarias. La mayoría de las MiPymes están lideradas por mujeres y han sido las más golpeadas por la Covid-19, por ende, necesitamos poner a la mujer en el centro de la recuperación económica pospandemia”.
¿En qué países están esas mujeres empresarias?
“En toda la región, esta es una plataforma abierta para las mujeres que se quieran conectar. No hay que olvidar que en la pandemia la tasa de desempleo de la mujer en Colombia se ubicó 22,7 %, mientras que la del hombre fue de 13,4 %. Se perdieron 400 mil empleos de mujeres”.
¿Qué beneficios implica trabajar en las empresas de las mujeres?
“Un 20 % de las microempresas aún están en riesgo de cierre, sin contar las que han cerrado hasta la fecha. En Colombia es el 50 % de esas empresas; en la región, el 70 %. Si tú cierras la brecha de género, la región se puede beneficiar de un crecimiento del PIB de más del 20 %. Eso incluye trabajar en el empleo y reactivar las MiPymes”.
Esas MiPymes son las que pueden llevar el empleo a las comunidades…
“Las MiPymes van a favorecer el desarrollo de las economías locales. Esto no es solo un tema de beneficio para la mujer, sino para la sociedad: las MyPymes son el presente y futuro de la región y la mayoría de estas están lideradas por mujeres.
En Colombia la diferencia de desempleo entre mujeres y hombres es de nueve puntos. ¿Cómo se comporta ese indicador en el resto de la región?
“El fenómeno que se ve en Colombia es común. Incluso, hay una brecha menor que en otros países de la región. A las mujeres les está costando regresar a la fuerza laboral y por eso debemos hablar de habilidades, entrenarlas en nuevas áreas para que puedan tener herramientas para reincorporarse”.
¿Cuáles son las habilidades para las empresarias del futuro en la región?
“Economía verde, digital y plateada. Como Banco estamos apoyando que los gobiernos puedan abrirse un poco, flexibilizar el teletrabajo para las mujeres. Hay mucho por hacer y estamos listos para reactivar”.
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