Aunque en los últimos años ha habido mayor presencia de las mujeres en el campo de las CTIM (Ciencia, Ingeniería, Tecnología y Matemáticas), aún hay brecha por cerrar y puede ser con la química.
Los hombres siguen teniendo gran participación en cargos de alto nivel, y según datos de la UNESCO “a nivel global las mujeres representan el 33 % de investigadores en las ciencias”.
Hablando puntualmente de la rama de la química, surge la pregunta de ¿cómo fomentar la inclusión de las niñas desde pequeñas en esta área de las ciencias?
Gracias a la innovación que trae la educación, las opciones para elegir un campo ampliaron y no debe ser solo en las aulas, la tecnología es el mejor aliado de la formación académica.
Juan Diego Anaya, Senior Country Manager de la plataforma de educación Superprof, mencionó que “las clases particulares, ya sea de refuerzo o para aprender por primera vez sobre química son un punto a favor para que los padres incentiven a sus hijas a sumergirse en ese mundo.
Además, existen grandes herramientas a las que pueden acudir de forma virtual sin salir de casa, como es el caso de Superprof donde se puede acceder a una gama de profesores para recibir clases acorde a sus necesidades”.
De esa forma, es importante que las mujeres y niñas recuerden la cantidad de conocimientos y estudios que ha abarcado durante años la práctica de esta ciencia.
La química se puede subdividir en distintas disciplinas
- Bioquímica: Es el estudio e investigación de los seres vivos.
- Química – física: Ayuda a los científicos a estudiar y hacer investigación de los procesos energéticos, además a estos se suman los procesos, eléctricos, magnéticos, ópticos, mecánicos.
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- Química analítica: Se dedica a analizar las propiedades de los sistemas químicos, en esta se identifican y se determinan sus propiedades (esta rama puede ser dividida entre analítica, cuantitativa y cualitativa).
- Química pura, aplicada, orgánica, inorgánica, preparativa, quimiurgia, cristaloquímica, farmacéutica, ingeniería química, Iatroquímica, estequiometria y radioquímica.
Todas estas áreas, para Anaya son de gran relevancia para mantener y contribuir a una mejor calidad de vida para las presentes y futuras generaciones, puesto que los ingenieros químicos ayudan a que el mundo supere cualquier crisis.
