Colsubsidio, una de las cajas de compensación más reconocidas del país, ha incorporado automatización en sus procesos de evaluación crediticia.
Una de las alianzas tecnológicas clave en este proceso fue la integración con el motor de decisiones no-code, web y alojado en la nube de uFlow, empresa especializada en automatización del crédito.
Esta herramienta, según explicaron, le ha permitido a Colsubsidio reducir sus tiempos de ajuste de políticas de riesgo de varios meses a solo unos días, y mejorar los indicadores de otorgamiento de uno de sus productos financieros.
Destacado: Fundador de Nubank, David Vélez, realiza millonaria venta de acciones por US$435 millones
Resultados de la iniciativa
A partir de la implementación del motor de decisiones, Colsubsidio redujo el tiempo de activación de un cupo de crédito rotativo de 40 a ocho minutos, lo que representa una ganancia de cinco veces en agilidad; disminuyó la morosidad del 25 % al 12 %, e incrementó el monto de créditos otorgados cerca de un 12 %.
Si bien entre mayo de 2023 y abril de 2024 otorgó $64.897 millones, en el mismo periodo del ciclo siguiente la caja entregó $73.500 millones, un 11,78 % más que el periodo anterior.
Asimismo, con los procesos digitalizados, eliminó el uso de papel en los trámites, facilitó la integración con diversas fuentes de datos y mejoró el ticket promedio.
“Al principio parecía imposible automatizar decisiones que por años fueron gestionadas manualmente. Pero demostramos que, con tecnología ágil, datos, y reglas bien definidas, se pueden diseñar modelos de crédito personalizados, inclusivos, ágiles y automatizados de forma segura. El siguiente paso es profundizar en el uso de IA, ya que la estrategia y arquitectura de nuestro core está orientada al cross-selling o multiproducto, y el motor de uFlow nos permite esa apertura”, afirma Claudia Sossa, gerente de crédito social y seguros de Colsubsidio.
Impacto en otras áreas
Cabe destacar que los motores de decisiones de este tipo no solo automatizan los procesos de evaluación crediticia, sino también permiten incorporar variables no tradicionales en los modelos de riesgo, como el historial de cumplimiento, el comportamiento en otras líneas de servicio, la participación en programas sociales e incluso, la capacidad de implementar modelos de inteligencia artificial (IA) que aprenden, se adaptan y mejoran con cada nueva consulta.
“La ventaja es su capacidad de adaptarse y aprender del entorno. No se necesitan años de desarrollo para tener un modelo de riesgos digital que sea robusto. Se pueden hacer implementaciones ágiles, ajustes de políticas en tiempo récord, evaluar escenarios y tomar decisiones cada vez más inteligentes, y acelerar el go-to-market de productos financieros. La flexibilidad de nuestro motor ha sido clave en el proceso de transformación que viene liderando Colsubsidio”, explica Mariano Sokal, cofundador y director de uFlow.
Más allá de la eficiencia operativa, “lo que hace más relevante este caso es su impacto en la vida de las personas. En un país donde el acceso al crédito aún está marcado por la informalidad y las altas tasas de interés del sector no regulado, el crédito social de Colsubsidio ha facilitado que miles de trabajadores formales financien vivienda, educación, programas de salud, cultura, planes de recreación y turismo, entre otros”, concluye Sossa.