Un debate profundo sobre los modos y métodos de aprobación de la Asamblea Constituyente, de la que hablan desde el gobierno Petro, se vivió este miércoles 18 de junio entre el profesor y experto constitucionalista Mauricio Gaona y el ministro de Justica, Eduardo Montealegre.
El profesor llamó a varios puntos de alerta entre lo que busca el gobierno del presidente Petro y lo que debería pasar con el cumplimiento del orden constitucional.
En el marco de la discusión con Montealegre, Gaona explicó que en los llamados a una Asamblea Constituyente “los modos y las palabras” son fundamentales para entender el trámite que quiere hacerse para la aprobación del cambio a la Constitución.
¿Qué se quiere con la Asamblea Constituyente?
Dijo el ministro de Justica que la motivación más importante, para llevar a cabo la Asamblea Constituyente, es resolver el bloqueo que se presenta cuando el legislativo no avanza en las modificaciones sociales más importantes que requiere el país.
Postura que el profesor Gaona criticó duramente y pidió reconocer por lo que es: “oposición y no bloqueo institucional”, por lo que no es correcto llamar a cambiar la Constitución cuando el legislativo ejerce también su función de oponerse.
Más allá de esa discusión, Gaona enfatizó sobre una palabra de la Asamblea Constituyente de la que hablan el ministro de Justicia y el presidente Gustavo Petro.
Diferencias clave entre Asamblea Popular Constituyente y Asamblea Nacional Constituyente
Dijo Gaona que mientras el Gobierno se refiere a la Asamblea Popular Constituyente, el orden legal habla de Asamblea Nacional Constituyente. Aseveró el experto que ese cambio de apalabra es fundamental pues la asamblea popular se salta reconocimientos legales como el aval que debe dar el Congreso, mediante una ley para llamar a esas votaciones.
En cambio, la Asamblea Nacional Constituyente llama a todos los actores políticos del país, además de la ciudadanía, a que apruebe o no cambios a la Constitución que está vigente en el país desde el año 1991.
Es decir, la Asamblea Constituyente que promueve el gobierno Petro, la popular, llevaría a no reconocer al Congreso de la República y convocar el cambio mediante la recolección de 8 millones de firmas.
Efraín Cepeda, presidente del Senado, dijo en entrevista con W Radio, que cualquier intento por cambiar la Constitución deberá, primero, aprobarse por una ley que expida el Congreso de la República. De lo contrario, el registrador no podría llamar a esas votaciones.
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Por ahora, el ministro Montealegre explica que la Asamblea Constituyente es un debate que se abre para establecer los mecanismos de cambio que permitan agilizar las modificaciones que introducen las iniciativas sociales, a pesar de que expertos constitucionalistas insisten en que el mecanismo es contrario al orden normativo.
