Según el comentario económico de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), el hecho de que los países emergentes ahora no solo representan cerca del 60% del PIB global (vs. el 35% de tres décadas atrás), sino que se encuentran altamente endeudados, tanto en moneda local como extranjera (siendo el caso más preocupante el de China, con apalancamientos del 266% del PIB), podría fomentar la tensión financiera en el ámbito global.
“Se dice que el arsenal de instrumentos anticíclicos fiscales-monetarios se encuentra prácticamente agotado, con elevados stocks de deuda pública en el ámbito mundial (incluyendo el mundo desarrollado a niveles de +100% del PIB) y tasas de interés de los bancos centrales todavía relativamente bajas y que no podrían llevarse a umbrales negativos a nivel nominal”, añade el documento.
De acuerdo con Anif, esto último implica que no se tendría el espacio contra-cíclico suficiente para contrarrestar una posible recesión, en cuanto dichas tasas de interés tan solo lograrían descender desde niveles del 3% de la Fed y desde el 1% en el Banco Central Europeo durante el período 2019- 2020, mientras que en las últimas crisis (Lehman y .com) se han requerido recortes de 400-500 puntos básicos (pb) de la repo.
Para solucionar estas amenazas, Anif cree que es necesario “inflar la economía” a través de elevar las metas de inflación explícitas/implícitas que manejan los bancos centrales. De esta manera, habría necesidad de elevar las tasas de interés (de forma algo artificial) para que después, al necesitarlo, las tasas repo se puedan recortar ya no en 300 pb sino en los 500 pb que han sido norma en presencia de alta tensión financiera.
Sin embargo, la entidad advierte que esta solución encierra bastante de “ilusión monetaria” y no mira los fundamentales del sector financiero o del sector real. Par Anif “lo que es evidente es que se tiene una prolongada y marcada burbuja accionaria que debe continuar corrigiéndose, como lo ha venido haciendo la Fed de forma atinada”.
Anif concluye asegurando que “este continuará siendo un proceso algo doloroso, que seguramente acarreará pérdidas de valor para muchos hogares y firmas, pero ello estaba cantado desde el 2013-2014, cuando se anunció la necesidad de entrar a moderar los excesos de liquidez y de elevar las tasas de interés a su nuevo nivel-normal del 3%-4%”.