El Banco Popular de China (BPC, central) ha recortado en cinco puntos básicos, del 3,30 % al 3,25 %, la tasa de interés de su principal herramienta de préstamos a bancos, lo que supone la primera reducción en este indicador desde 2016.
En un escueto comunicado publicado en su página oficial, la institución se limitó a mencionar la bajada en las tasas de los servicios de préstamo a medio plazo (MLF, en inglés), que afecta a una inyección de 400.000 millones de yuanes (56.936 millones de dólares, 51.194 millones de euros) en el sistema financiero con vencimiento de un año.
Los analistas destacaron que el BPC parece volverse «más proactivo» ya que, según la consultora Capital Economics, está «comenzando a dar pasos más directos para bajar los costes de la financiación».
Según Julian Evans-Pritchard, analista de la citada firma, este movimiento está encaminado a rebajar los precios de los préstamos bancarios, y debería verse reflejado en la próxima lectura de su nueva tasa referencial para créditos (LPR), introducida en agosto y cuya siguiente actualización está prevista para el próximo día 20.
«Esta última rebaja del MLF bajará los costes de financiación para los bancos y, como resultado, los bancos estarán más dispuestos a bajar sus tasas de préstamo», indicó.
No obstante, el experto advierte de que las rebajas en MLF y LPR no serán suficientes para revertir la ralentización del crecimiento crediticio, afectado por la desaceleración de la economía china, a la que también afectan factores externos como la guerra comercial que libra el país desde hace más de año y medio con Estados Unidos.
El pronóstico de Evans-Pritchard es que hacia mediados de 2020 las tasas del MLF se vean reducidas en otros 70 puntos básicos.
(Con información de Expansión)
—