El acceso a internet dejó de ser un servicio complementario para convertirse en una condición básica, bajo esa premisa se presentó la nueva infraestructura de conectividad que entra en operación en el Chocó.
En Quibdó se presentó la entrada en operación de un nuevo cable de fibra óptica que atraviesa el Chocó y conecta al departamento con la red nacional, un hito de infraestructura en una de las regiones históricamente más rezagadas en conectividad.
Pero la tarea no fue fácil, el despliegue del cable —que recorre más de 326 kilómetros— enfrentó las condiciones propias del territorio: ríos, selva densa y un contexto de seguridad complejo. La ejecución del proyecto requirió acompañamiento permanente de la Fuerza Pública.

Durante el tendido, técnicos trabajaron bajo custodia de unidades del Ejército, mientras se coordinaban rutas, bodegaje de insumos y tramos de intervención para reducir riesgos, “Mientras un técnico realizaba el tendido del cable, dos soldados del Ejército permanecían en labores de custodia”, comentó un técnico.
Más allá de los obstáculos técnicos, uno de los principales desafíos fue el relacionamiento con las comunidades y la garantía de seguridad en zonas con limitada presencia estatal. Los técnicos del proyecto señalaron que el respaldo institucional fue determinante para completar la obra, que se desarrolló durante 18 meses.
El cambio del servicio del internet en Chocó
La puesta en marcha se anunció desde el parque Manuel Mosquera Garcés, en el centro de Quibdó, con la presencia de autoridades departamentales y nacionales, entre ellas la gobernadora del Chocó, Nubia Carolina Córdoba, y la ministra TIC, Carina Murcia.
El evento marcó el cierre de la fase de construcción y el inicio de operación de la infraestructura.
Ahora, la red de fibra óptica se extiende en nueve tramos estratégicos que parten desde Antioquia, atraviesan Quibdó y llegan hasta Yuto.

La infraestructura permitirá ampliar la capacidad de transmisión de datos y mejorar la estabilidad de la red móvil en el departamento, con impacto en servicios públicos, educación, salud, comercio y gestión institucional.
Como parte de los cambios asociados a esta infraestructura, Quibdó e Istmina quedaron habilitadas para el acceso a tecnología 5G. De manera complementaria, se habilitaron zonas de acceso gratuito a internet en comunidades ubicadas a lo largo del trazado del cable, una medida que busca ampliar la cobertura y reducir barreras de acceso en áreas con limitada conectividad.




