En el marco de la más reciente Junta Directiva del Banco de la República de Colombia, tres de los siete miembros votaron que las tasas de interés debían aumentar en 75 puntos básicos, llevándolas al 3,25 %, sin embargo, ganó la mayoría que esperaba un aumento de 50 puntos básicos.
En el grupo que pidió un incremento de 75 puntos básicos se tuvo en cuenta que la aceleración de la inflación y el incremento de sus expectativas preocupan por dos frentes: por el nivel que han alcanzado y porque los factores que los generan comienzan a adquirir un carácter estructural.
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Esto último “ante la incapacidad de la oferta de atender los requerimientos de la mayor demanda del mercado”, se lee en las minutas del emisor tras la Junta del 17 de diciembre.
Perspectivas sobre incremento del salario mínimo
Estos codirectores agregan que el reciente aumento del salario mínimo, del orden del 10,07 % (muy por encima de la práctica usual de basarlo en la inflación observada y las ganancias en productividad), “crea en la opinión pública una percepción de normalidad de aumentos nominales muy superiores a la meta de inflación”.
El punto delicado para esta parte de la mesa directiva del Banco de la República está en que el aumento del salario mínimo decretado “podría contribuir a desanclar las expectativas respecto de esta (la inflación)”.
Hay que recordar que el gerente del emisor, Leonardo Villar, ya había manifestado que el alza del salario mínimo hace más exigente la tarea del Banco de la República en el control de la inflación.
“Esto, unido a la notoria aceleración de los distintos indicadores de inflación observada y esperada desde la sesión anterior de la Junta Directiva, hace que para este grupo sea conveniente acelerar el ritmo de ajuste de la política monetaria”, concluyen las minutas.
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