Las provisiones de los establecimientos de crédito han preocupado a los mercados financieros desde el año pasado debido a la afectación que sufrieron los balances por culpa de casos como la Ruta del Sol, Electricaribe y el sistema de transporte público de Bogotá, entre otros.
El nivel más alto en el crecimiento de las provisiones de los bancos se reportó a la Superintendencia Financiera en marzo del presente año cuando se ubicaba en niveles del 20% real.
Pero, ahora, según un reporte con corte a agosto de 2018, las provisiones –medidas como la cantidad de recursos que conserva el banco por haber contraído una obligación- mantuvieron su tendencia bajista que inició en marzo.
En julio pasado el crecimiento real de las provisiones era del 16,23%, pero en agosto llegó a 15,32%, es decir, su nivel más bajo en lo corrido del 2018.
Varios banqueros han reconocido que las provisiones seguirán afectando sus balances al menos durante varios trimestres más.