El metaverso es un espacio digital al que se accede a través de dispositivos especiales como gafas de realidad virtual o aumentada dónde se puede interactuar con otros usuarios. Cada uno de ellos tiene un avatar, su personaje en el mundo virtual, e interactúan por medio de objetos en mundos inmersivos.
En este ciberespacio se puede trabajar, disfrutar con la pareja y amigos con juegos y hasta realizar compras. Es una vitrina para que las empresas presenten sus productos y servicios en un formato más dinámico, mezclando estrategias de branding y marketing.
Desarrollar esta herramienta en las empresas permitirá hacer los productos o servicios más atractivos y con un valor diferenciador con respecto a la competencia.
El desarrollo de diferentes plataformas digitales ha cambiado la forma de adquirir productos, bienes y servicios, y más con la pandemia. El e-commerce impulsó las compras de quienes buscan, más allá de conseguir un artículo, tener una experiencia de consumo única.
De acuerdo con el estudio EY Future Consumer Index, realizado por EY, firma líder en servicios de auditoría, impuestos, consultoría, y otros servicios, se encontró que, a nivel global, las generaciones jóvenes llevan la batuta frente al consumo a través de tecnologías y experiencias emergentes.
Según los resultados de la encuesta, una de cada 10 personas precisó que son consumidores digitales, donde el 17 % emplea monedas digitales y el 14 % ha usado la tecnología virtual para vivir experiencias inmersivas, como lo es el metaverso.
Ventajas de estar en el metaverso económico
Es por eso que para aumentar el tráfico en las tiendas virtuales o en los Marketplaces, tanto de personas como en tiempo de visita, las cadenas comerciales deberán evolucionar a un formato de comercio virtual. Para ello, pueden recurrir al metaverso, entendido como una red expansiva de simulaciones y escenarios tridimensionales que permite a los usuarios sumergirse en un espacio donde lo digital y lo físico convergen.
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“Según nuestro estudio, el 36 % de las personas planean visitar solo las tiendas que ofrecen grandes experiencias, lo cual demandará creatividad por parte de las empresas para hacer de sus productos toda una experiencia en la compra y los forzará a tener un dinamismo que el mismo consumidor y la competencia exigirán”, advirtió Jesús Cuenca, Socio de Technology Consulting, EY Latinoamérica Norte.
Las empresas que decidan apostarle al metaverso como eje experiencial e innovador para sus clientes también deben tener presente que este espacio debe dotarse de capacidades reales de intercambio, pago y trazabilidad.
Allí, las tecnologías como el blockchain permitirán, a su vez, que la experiencia sea de uso e interés real para los consumidores y las entidades.
Retos del metaverso para comercios minoristas
Las marcas deben priorizar el ciclo de venta y entrega de productos, puesto que, pese a que los compradores harán sus transacciones digitalmente, estos bienes serán liquidados por medios de pago tanto tradicionales como en línea.
Otro reto para los conglomerados empresariales es contar con cadenas de suministro que sean eficientes y dinámicas a la hora de entregar los productos debido a que actualmente, la mayoría de las tiendas no cuentan con procesos diseñados para esto bajo este nuevo contexto digital.
“Al detectar los casos de uso del metaverso en los negocios con anticipación, estos podrán aprender y prepararse para etapas posteriores. Hasta el momento no hay una fórmula probada que les funcione a todos los negocios en general, por lo que empezar a probar este nuevo mundo definitivamente dará a las empresas una ventaja competitiva a futuro”, concluyó Cuenca.
