En medio de reajustes organizaciones y planes de recuperación financiera, la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB) reportó sus resultados para el primer trimestre de 2025, con un saldo negativo.
De acuerdo con sus estados financieros, la ETB perdió a marzo de este año $45.557 millones, cifra superior a la pérdida del mismo periodo de 2024, que se ubicó en $13.535 millones.
Vale recordar que, de acuerdo con el balance revelado por la empresa capitalina, al cierre de 2024, su pérdida neta fue de $82.535 millones que superó el saldo en rojo del 2023 cuando fue de $45.276 millones.
Es decir, solamente en el primer trimestre de 2025, la pérdida fue levemente superior al negativo de todo 2023 y la mitad de 2024.
En el documento de resultados se señala que “al 31 de marzo de 2025, ETB y sus subsidiarias presentan pérdida del período por $46.154 millones, pérdidas acumuladas por $487.492 millones y capital de trabajo negativo por $148.780 millones”.
La compañía distrital dio a conocer que la llamada con inversionistas para la presentación de los resultados financieros correspondiente al primer trimestre del año se hará el 3 de junio.
ETB defiende su capacidad para mantener sus operaciones
Los estados financieros consolidados de la ETB sostienen que “la administración mantiene expectativas razonables sobre la capacidad para mantener sus operaciones en el curso normal del negocio y, por ende, prepara los estados financieros bajo el supuesto de negocio en marcha”.
Dice además que “cuenta con la liquidez necesaria para cumplir con sus obligaciones a corto plazo porque: a) dispone de recursos líquidos (efectivo y cuentas por cobrar), b) se espera facturar y recaudar $215.918 millones por la ejecución del contrato de Centros Digitales, y c) tiene líneas de crédito preaprobadas por $142.981millones, lo que garantiza mantener el cumplimiento de los indicadores pactados con los bancos”.
También reconoce la empresa de telecomunicaciones que “se anticipa un crecimiento sustancial en la actividad operativa en los próximos años, acorde con la fase final de la migración total de cobre a fibra óptica. Esta estrategia es crucial para la viabilidad a largo plazo de la empresa, consolidando su estructura financiera y facilitando una adaptación efectiva a los desafíos y oportunidades del entorno empresarial en constante evolución”.
