En el marco de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, se ha abierto una posibilidad “enorme” de localización de empresas del país asiático en las zonas francas colombianas, para aliviar la imposición de aranceles cercanos a los 150 mil millones de dólares a sus exportaciones por parte del presidente Donald Trump.
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Así lo manifestó a Valora Analitik al viceministro de desarrollo empresarial del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, Saúl Pineda, en Medellín.
Dijo que ya en el Valle del Cauca hay una experiencia de localización de una inversión china por un millón de dólares, en tanto en la Zona Franca del Pacífico, que está ensamblando televisores, “que son componentes de alta tecnología con la formación in situ de cerca de 40 operarios para los cuales no existen programas de formación en Colombia”.
Añadió que es una empresa invirtiendo en el país para exportar a Estados Unidos, así como al mercado de América Latina.
“El presidente Trump movió el cañaveral de la reducción de impuestos, al reducir la tarifa corporativa de EE. UU. al 21 %, eso prácticamente lo convierte en una gran zona franca, si tenemos en cuenta que las de Colombia por concepto de impuesto de renta apenas cobran el 20 %”, explicó.
Algo similar está ocurriendo en América Latina, con una serie de proliferaciones de zonas francas, algunas incluso con beneficios mucho más competitivos que Colombia, cuando se habla de prórrogas (hasta 50 años) o periodos de vigencia.
Informó sobre una visita del gobernador del Atlántico a China para buscar la localización de empresas chinas en la Costa Caribe, “pensando exportar desde el territorio aduanero nacional o de zonas francas, que se han convertido en un oasis de competitividad”.
Además, en un contexto en el que los empresarios del territorio nacional pagan 33 % de impuestos, sobre todo de renta, con la particularidad de que se puede ingresar en las zonas francas, con cero aranceles, los bienes intermedios que se procesarán con destino de exportación, y que, con las ventas externas, las compañías se ahorran el IVA para el destino final de esos productos, siempre que no sea el mercado nacional.
“Incluso, debo decir que hay empresas norteamericanas que producían desde China para entrar al mercado estadounidense y que ahora están buscando espacios en Colombia o en zonas francas para localizarse”, afirmó.
Añadió que sabe del interés que tienen los chinos en llegar a producir energía y de involucrarse en los temas de infraestructura, y destacó las posibilidades de la Orinoquía desde el sector industrial.
“Hay una agenda muy activa con China, con que seguramente no vamos a tener un Tratado de Libre Comercio (TLC) próximamente, pero sí seguramente acuerdos de inversión que sigan su tendencia de estar en América Latina. Porque en ese caso, tenemos la gran ventaja de que es muy pragmática en su inserción internacional. Está practicando que no importa de qué color sea el gato, sino que pueda cazar ratones, no está evaluando colores políticos para hacer negocios”, manifestó.[/content_control][login_widget]
