De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), un incremento del proteccionismo podría afectar, a mediano plazo, el crecimiento de América Latina.
Así mismo, la entidad considera que otros de los factores de riesgo que pueden afectar a la región son una posible escalada de las disputas comerciales en curso, las fluctuaciones en los precios de la energía y un abrupto endurecimiento de las condiciones financieras mundiales.
Para el FMI, la región debe prestar atención a los riesgos domésticos, los cuales se han intensificado desde la primavera, e incluyen riesgos políticos, así como fenómenos naturales y meteorológicos como los huracanes en el Caribe.
El organismo multilateral aseguró que «el crecimiento económico en América Latina perdió su momentum».
Sin embargo, para el FMI la mejora de los términos de intercambio durante el año pasado y las mejoras en la confianza de los consumidores y las empresas, han impulsado las perspectivas de crecimiento en algunas economías andinas como Colombia, Chile y Perú.
Así mismo la entidad considera que la actividad económica se está recuperando en el Caribe, lo que refleja el repunte en el turismo sumado al robusto crecimiento de Estados Unidos.
Cabe destacar que el pasado 8 de octubre la entidad redujo sus pronósticos de crecimiento para América Latina y el Caribe a 1.2% en 2018 y 2.2% en 2019, luego de que en mayo pronosticara un crecimiento de 2% y 2,8%, respectivamente.
Para Colombia, el FMI mantuvo la proyección para 2018 en 2,8% y para 2019 en 3,6%. La entidad considera que la recuperación económica en el país sigue siendo impulsada por los mayores precios del petróleo.
La recuperación moderada en América Latina se basa en resultados de crecimiento divergentes en toda la región. En algunas de las economías más grandes de la región, la recuperación ha disminuido drásticamente, a medida que las características específicas de cada país amplifican el impacto de las crecientes tensiones comerciales y el endurecimiento de las condiciones monetarias.