En julio pasado, el Ministerio de Agricultura anunció que, después de 33 años, acabaría con el incentivo arrocero. Su objetivo de este incentivo es sacar del mercado el excedente del grano que se genera durante el segundo semestre del año. El fin de ese incentivo generó propuestas y que el Gobierno tuviera que sentarse a negociar con distintos actores de la industria.
Durante el Capital Summit, Valora Analitik conversó con José Manuel Suso, gerente general de Arrocera La Esmeralda (Arroz Blanquita). Esta tiene su operación principal en Jamundí, Valle del Cauca, y cuenta con una segunda planta en Casanare, uno de los departamentos con mayor producción de arroz en Colombia.
Sobre el incentivo, explicó que, este año, “no funcionó para la industria, sino para los agricultores. Y aunque hubo mucho ruido de que se estaban cambiando las condiciones, no ha pasado nada”. Suso también habló de otros temas frente al estado de la industria y al de su empresa, fundada en los años 50 y de la que dice que es la “más antigua viva” de Colombia.
Arroz Blanquita y la expropiación ‘exprés’
A finales de agosto, se conoció un decreto del Ministerio de Agricultura, que está para comentarios, con el que se empezó a rumorear, de nuevo, que el Gobierno de Gustavo Petro quiere impulsar la expropiación ‘exprés’. Es decir, facilitar el procedimiento para este mecanismo.
Congreso Empresarial Colombiano (CEC) de la ANDI del 2023, la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, negó que ese sea el propósito. “No se trata de facultades expropiatorias yo creo que es importante generar esta pedagogía al respecto, no es la expropiación exprés”, dijo.
Al respecto, Suso, de Arroz Blanquita, aseguró que es “un tema que apenas está decantándose, que está en discusión”. Sin embargo, manifestó estar seguro de que “se harán los ajustes necesarios (para que el decreto) se enmarque en la Constitución”.
Y también se aventuró a dar una propuesta, con base en una experiencia de su compañía. En un predio llamado La Novillera, en Jamundí, “hay 130 familias produciendo arroz. Arroz Blanquita dio recursos, conectamos a productores con créditos para maquinarias y tiene también cultivos de pancoger. Es un modelo que se puede replicar”.
Frente al tema de con qué tierras, dijo que se pueden usar los terrenos que están en poder de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).
No obstante, formularle la propuesta al Gobierno Nacional no ha sido posible. Aunque con la anterior ministra de Agricultura, Cecilia López, se reunió, no ha sido posible un encuentro uno a uno con la ministra Mojica.
“Como Arroz Blanquita, nos reunimos en tres ocasiones con Cecilia López. Los agricultores le contaron que no están interesados en que se le quite la tierra a nadie, sino que haya posibilidad de financiamiento para sacar sus procesos adelante. Con la ministra nueva no he podido reunirme, aunque el gremio sí lo hizo”.
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Sostenibilidad ambiental y social
Otro tema tocado por José Manuel Suso en la entrevista con Valora Analitik fue el de la sostenibilidad como motor de su empresa.
En la actualidad, Arroz Blanquita cuenta con 670 agricultores y genera más de 3.500 empleos en sus plantas de Jamundí y Casanare. Además, dijo, mientras que el promedio de producción de arroz en Colombia es de 4,8 toneladas, el de los productores de la compañía es de, aproximadamente, 8 toneladas.
Dicho resultado, aseguró, se debe a que “subimos la productividad bajando el impacto de los insumos, con el manejo del agua y el carbono neutro”. Entre esas iniciativas está la captura de, uso de drones para disminuir el consumo de combustible y de tecnología GPS para ahorrar agua. “Las empresas deben modelarse hacia la sostenibilidad. Y las empresas sostenibles tienen a su gente más contenta”.
Agregó, también, que hay un componente social en el trabajo de la Arrocera La Esmeralda. Por ejemplo, entre los productores hay “exparimilitares y exguerrilleros que ahora producen con nosotros. La inclusión es una oportunidad para las empresas”.
