El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se refirió al dinero faltante para terminar las obras que conectan a Bogotá con Villavicencio.
Aseguró que se requieren $1,2 billones para invertir entre este año y el próximo los 55 puntos críticos de la vía que comunica a Bogotá con Villavicencio.
“Hoy está planillado que si queremos resolver los puntos críticos en la Vía al Llano tenemos que poner $1,2 billones entre el 2024 y el 2025 y acelerar las obras de esos puntos críticos”, dijo el funcionario.
Además, resaltó que son 55 los puntos críticos que tiene esta vía, dentro de los cuales se encuentra la conexión con la vía del puente del Chirajara que en su primera infraestructura se derrumbó en el año 2018.
“Colombia entregó la concesión de la vía al Llano, existe, pero están excluidos de la concesión 55 puntos críticos, los puntos críticos son los que tienen problemas, quien tiene que asumir los puntos críticos es Invías”, agregó.
Reiteró que se deberá revisar la posibilidad de reformular las vigencias futuras para financiar obras prioritarias que no tienen recursos.
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“¿Puede el Estado seguir entregando recursos para que la obras no avancen, pero se cumplan los contratos?, nosotros creemos que es hora de revisar hasta dónde podemos reformular algunos de los elementos de las vigencias futuras que están comprometidas, pero que la obra no está respondiendo”, puntualizó Bonilla.
Anif responde al ministro sobre obras de vigencias futuras
En medio del seminario de perspectivas de Anif, el presidente de este centro de estudios, José Ignacio López, dijo que el ministro tiene razón en el sentido de que algunos recursos están guardados en fiducias.
Pero también advirtió que los dineros en esas fiducias se van entregando al contratista solo cuando cumple los objetivos de construcción.
Ha habido casos como la vía Mulaló-Loboguerrero en el Valle del Cauca que lleva varios años detenida por temas como las licencias y consultas con las comunidades.
El ministro Bonilla recalcó que se abre la posibilidad de renegociar las concesiones con el fin de guiar esos recursos de vigencias futuras hacia otros proyectos en zonas que necesitan más conexiones viales como el sur de Colombia y el departamento de Chocó.
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