El anuncio de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China es «posible» el próximo viernes, dijeron fuentes a CNBC.
Una delegación de Estados Unidos se reunió con negociadores chinos en Beijing el miércoles, mientras las dos economías más grandes del mundo tratan de aclarar los detalles de un acuerdo. El viceprimer ministro chino, Liu, viajará a Washington para conversar la próxima semana.
Washington y Beijing han presionado para resolver una disputa comercial que llevó a una serie de aranceles y aumentó los temores sobre un daño económico en espiral. Si bien ambas partes han promocionado repetidamente el progreso en las conversaciones, las disputas como la eliminación inmediata de las tarifas o su mantenimiento como una medida de cumplimiento para detener prácticas como el robo de propiedad intelectual han descarrilado un acuerdo final. El presidente Donald Trump también quiere que China compre más productos estadounidenses para reducir el déficit comercial entre los países.
El miércoles, la Casa Blanca dijo que las últimas conversaciones acercaron a Washington y Beijing a un acuerdo. En una declaración, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, dijo: «Las discusiones siguen centradas en lograr avances sustanciales en importantes problemas estructurales y en reequilibrar la relación comercial entre Estados Unidos y China».
El jefe de personal de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, dijo el martes que los Estados Unidos deberían saber «de una forma u otra en las próximas dos semanas» sobre cómo se resolverán las negociaciones comerciales.
La Casa Blanca no comentó de inmediato el miércoles sobre la posibilidad de un acuerdo para el próximo viernes.
Los informes han sugerido que la administración de Trump podría ceder en algunas disposiciones como parte del acuerdo. En un acuerdo final, los EE. UU. podrían eliminar de inmediato un arancel del 10% sobre parte de los US$200 mil millones en productos chinos a los que aplicaba aranceles, informó Politico el miércoles.
Washington mantendría un arancel del 25% sobre US$50 mil millones en bienes hasta después de las elecciones de noviembre de 2020, según el medio.
Los inversores han observado de cerca las conversaciones en curso. Una disputa comercial prolongada dañaría a las empresas estadounidenses y a la economía global.
