Son varias las preocupaciones que genera el hecho de que Colombia vaya a informar, por segundo año consecutivo, una inflación que supere el rango meta del Banco de la República: entre el 2 % y 4 %.
A ojos de los analistas, Colombia llegaría a tener una inflación arriba del 6 % en 2022, dato que preocupa por lo que esto implica para el bolsillo de los colombianos.
La pregunta ahora es por cuál será el tiempo de duración de ese fenómeno de altos precios. Y si bien la respuesta no puede ser exacta, hay al menos una ventana de expectativas para que el fenómeno inflacionario toque techo.
Varios analistas, incluso el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda, están viendo que la inflación podría alcanzar su punto máximo hacia la segunda mitad del año.
De hecho, se espera que la curva de descenso empiece a verse desde mayo, al menos desde la perspectiva del ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo.
Los pronósticos de inflación
Con esto de base, en abril y mayo, la inflación anualizada en Colombia va a estar arriba del 8 % y empezará un tránsito más hacia el 5,5 % o el 6 % desde mayo, aunque la perspectiva no es unificada en ese sentido.
Pero, ¿de dónde sale el pronóstico? Del hecho de que se esperan dos efectos principales: de un lado, una normalización de precios de los alimentos que se justifica en una normalización de las cadenas productivas y de transporte en el mundo.
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Mientras que, desde el lado netamente local, el Ministerio de Hacienda prevé que las decisiones que se tomaron en materia de reducciones arancelarias van sentirse desde el quinto mes del año.
Los colombianos, de cumplirse la expectativa, empezarían a ver entonces bienes más baratos, sobre todo para los de alimentos, desde junio o julio de 2022.
“Para esta ocasión no solamente es un choque, son muchos choques los que están explicando el escenario complejo de los precios. Nosotros también creemos en un punto máximo de inflación para 2022 entre abril o mayo, pero la reducción no va a impedir que incluso el dato termine cerca del 7 %”, agregó Juan Pablo Espinosa, director de investigaciones económicas de Bancolombia.
Otra es la visión de Juana Téllez, jefe de investigaciones de BBVA Research, para quien, si bien la curva de inflación va a reducirse en las próximas semanas, no será lo suficiente y el dato a fin de 2022 podría alcanzar el 8 %.
Efectos estructurales
Haciendo la advertencia, eso sí, de que tener precios de alimentos como los de hace un año puede ser un escenario todavía poco alcanzable o incluso que no llegue a materializarse.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, ha llamado la atención en el hecho de que todas esas presiones inflacionarias extranjeras, a las que habría que sumársele el fenómeno de la guerra entre Rusia y Ucrania, parecen volverse estructurales.
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Es decir, cabe la posibilidad de que existan productos, sobre todo alimenticios, que sigan en el mercado a precios altos.
El otro efecto que resolverá la duda sobre hasta cuándo se va a tener una inflación alta en Colombia tiene en cuenta que el Gobierno Nacional, y los empresarios, puedan encontrar nuevos socios comerciales por el cierre de Rusia y Ucrania y su peso en el suministro de insumos para el agro.
