Un nuevo análisis del Instituto Internacional de Finanzas (IIF) reveló que el impacto del coronavirus en China empieza a ser preocupante, debido a que se está extendiendo más en el tiempo.
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Esto pues estudiando cómo se presentó la situación con el Síndrome respiratorio agudo y grave (SARS) de 2003 mostró que, si bien el SRAS puede ser un punto de referencia útil, vale la pena destacar por adelantado que en pocas semanas el coronavirus ya se ha extendido más allá del SARS en seis meses, lo que aumenta la posibilidad de que su impacto sea un orden de magnitud mayor.
“Además, China es una economía mucho más grande hoy y está más integrada en las cadenas de suministro. Teniendo en cuenta estos calificadores, encontramos que el SARS causó una caída aguda, pero de corta duración en el crecimiento de China y otros mercados emergentes en Asia”, destacó el IIF.
También indica que se produjo una interrupción importante en el sector transporte, pero el comercio de bienes no se vio visiblemente afectado.
“Como resultado, el gran superávit en cuenta corriente que Asia tenía en ese momento no se movió mucho. Los flujos de capital cayeron con el impacto, pero se recuperaron rápidamente sin mostrar una volatilidad inusual”, agregó.
No obstante, reiteró que el coronavirus continúa siendo una amenaza mucho más peligrosa debido a sus consecuencias y los más de 1.000 fallecidos que ya registra en China.
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