Colombia, al igual que el grueso de economías mundiales, está revisando constantemente cuáles son las mejores oportunidades para tener relacionamientos de comercio internacional más sólidos y capaces de solventar crisis económicas, un mecanismo en ese sentido es el tratado de libre comercio.
Un primer motivo de importancia de un tratado de libre comercio es ese: abre puertas entre una o varias economías para el intercambio de bienes y servicios.
De esta manera, un tratado de libre comercio se rige por la hoja de ruta que marca la Organización Mundial de Comercio (OMC): si bien las especificaciones de estos tratados al final corresponden a cada nación comprometida en el acuerdo, en lo general se trata de reducciones arancelarias para darle preferencia a una u otra economía.
Un punto muy importante es que el tratado de libre comercio crea mecanismos y lógicas de facilitación comercial: incluso con reducciones tributarias o facilitación de trámites.
Pero, muy importante, en ningún momento ese tratado de libre comercio es una agenda bilateral de entendimiento social o político, simplemente se concibe como una relación netamente comercial.
Objetivos del tratado de libre comercio
Entre los otros objetivos importantes de estos acuerdos comerciales se tienen en cuenta que se constituyen como marcos de entendimiento para la protección de la propiedad intelectual, así mismo para darle un impulso a la competencia justa y estimular la producción local.
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Para poner un ejemplo, y sin ser la regla para cada uno de los tratados de libre comercio que se cierran en el mundo, una iniciativa de esta índole busca suplir parte de las necesidades que tienen las naciones con el vínculo comercial.
Entonces, un tratado de libre comercio entre Colombia y los Emiratos Árabes Unidos puede hacerse teniendo en cuenta lo siguiente: el mercado de los Emiratos necesita proveedores de café con precios competitivos, por lo que Colombia podría suplir esa demanda.
En cambio, Colombia busca mejores precios en insumos para el agro: fertilizantes o concentrado para animales. En ese caso, dicho tratado de libre comercio buscará que las dos economías tengan facilidades arancelarias, tributarias o de trámite para que los respectivos productos entren más fácilmente.
Puntos débiles del tratado de libre comercio
Finalmente, hay que tener en cuenta que un tratado de libre comercio también genera algunas distorsiones, por lo que también cuentan con desventajas.
Una de las mayores debilidades de este tipo de iniciativas tiene que ver con que se suele ver más favorecida la economía más fuerte en el tratado comercial.
Adicionalmente, también existen deficiencias porque las grandes empresas, al tener tratados de libre comercio que les benefician, ven en las economías con los acuerdos la oportunidad de establecer puntos de operación, generando problemas para el mercado laboral de la nación más débil.
Y, por último, hay también la posibilidad de que los pequeños productores de un sector al que se le reduzcan los aranceles, en el marco del tratado de libre comercio, se vean afectados por no poder competir con los precios de las compañías extranjeras.