Duante un foro virtual organizado por la administradora de fondos de pensiones y cesantías Protección, Kathryn Rooney Vera, directora estratega de Investigaciones Macroeconómicas de Bulltick Capital Markets, indicó que el mundo no está en una recesión sino en una depresión económica por culpa del coronavirus.
“Estamos enfrentando en vez de una recesión una depresión a una magnitud no vista. Entre más cerrada esté la economía va a ser peor. Estamos matando la economía con las medidas de aislamiento que se han implementado”, dijo Rooney.
Indico que el aislamiento social para contener el coronavirus debe irse relajando para ir reactivando poco a poco la activad productiva de los países.
“Mantener la economía cerrada y no dejar que las personas salgan a trabajar tienen repercusiones no deseadas. Por ejemplo, en Estados Unidos, los subsidios de desempleo pueden subir a 50 millones mientras que creo que el país va a revelar que se perdieron 24 millones de trabajos en un mes”, dijo.
En las últimas siete semanas del año, las solicitudes de desempleo en Estados Unidos llegan a 33,5 millones.
Debido a la persistencia del virus, Kathryn Rooney Vera ve un dólar fuerte en el ámbito global por lo que queda del año, aunque espera que la tendencia se modere una vez superada la pandemia.
Señaló también que para superar la crisis se necesita una vacuna o un remedio contra el coronavirus.
Para 2021, la analista prevé que la recuperación económica será marcada e impulsada, principalmente, por la reactivación del consumo.
“2021 va a ser un año de enorme crecimiento económico porque tendremos el escenario de política expansiva sumamente floja y el regreso del consumo como motor de la economía va a ser fundamental”, dijo.
Agregó que, si bien en 2020 la inflación no va a ser una amenaza, se debería tener cuidado con el comportamiento del indicador a partir del próximo año.
Finalizó recomendando a los inversionistas no perder de vista los activos de renta fija indexados a la inflación y las acciones de compañías que son ayudadas por los gobiernos como posibles inversiones positivas.
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