Los rolos y paisas pierden, en promedio, 74 horas al año por culpa del tráfico, siendo el modelo híbrido de trabajo como una solución al problema de movilidad.
En promedio en Bogotá una persona pierde 94 horas al año en trancones mientras que, en Medellín, cerca de 53 horas. De acuerdo con un estudio a nivel latinoamericano, el 82% de los encuestados manifestaron que el modelo de trabajo híbrido es la mejor opción para retomar sus labores. Vea más en finanzas personales.
No es secreto que la movilidad en ciudades como Bogotá y Medellín es uno de los principales problemas para sus habitantes. Un estudio realizado por la empresa Inrix comprobó que, en promedio en Bogotá, una persona pierde 94 horas en trancones mientras que en Medellín un promedio cercano a 53 horas al año. Estos trancones (o tacos, en Antioquia) tienen su mayor auge en las famosas horas pico, con lo que las personas sacrifican el tiempo con sus familias y en general su calidad de vida.
Recientemente, el trabajo híbrido se ha posicionado como una solución a estos problemas de movilidad, ya que permite que las personas sigan teniendo contacto con sus centros de trabajo sin tener que afectar su calidad de vida al pasar muchas horas en el tráfico.
En este sentido, las empresas se encuentran en un momento determinante para el futuro de sus empleados, ya que las condiciones sanitarias se prestan para un retorno a la normalidad; sin embargo, nuevos factores como la movilidad pueden afectar los niveles de productividad de los empleados.
Empresas deben adaptarse al modelo de trabajo híbrido
El auge de espacios como WeWork ha posibilitado que las compañías de todos los tamaños puedan tener alternativas de trabajo híbridas y flexibles para sus colaboradores que hace unos años eran impensables en nuestro país.
Al respecto, Juan Carlos Peñaloza, country manager de WeWork en Colombia señala que “las empresas deben adaptarse a esta nueva realidad pensando en favorecer a sus colaboradores”.
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Y señala que “En nuestro estudio “Redefiniendo los modelos de trabajo en Latinoamérica” el 66% de los colombianos encuestados afirmaron que la pérdida de tiempo que se genera gracias a los desplazamientos que se deben hacer entre la casa y la oficina, es la mayor desventaja del trabajo presencial, lo que muestra que las sedes laborales estáticas y lejanas de los hogares son cosas del pasado, ahora debe primar el poder ofrecer espacios de trabajo más cercanos y convenientes en donde la productividad no se vea afectada por largas horas de desplazamiento. Esto es una de las ventajas que desde WeWork vemos al poder ofrecer a nuestros miembros la posibilidad de que sus colaboradores operen en la sede que más se les facilite por ubicación y cercanía a sus hogares”, puntualizó.
El teletrabajo pandémico, en su recta final
El fin del teletrabajo pandémico puede estar por llegar a su fin y las implicaciones para las empresas pueden ser variadas, desde retomar sedes en arriendo, que elevan sus costos operativos, hasta asegurar las condiciones necesarias para que no se constituya una relación de teletrabajo permanente, todo esto bajo la premisa de buscar una opción que no afecte la buena productividad alcanzada por el trabajo en casa y que permita la flexibilidad que las cuarentenas trajeron consigo.
Cabe resaltar que la dinámica del trabajo presencial no volverá a ser igual, un estudio realizado recientemente, por OWL Labs, determinó que el 22% de los empleados se siente más cómodo en modelos mixtos, ya que esto disminuye su estrés y aumenta su productividad, es por esto que, alternativas que permitan tener sedes flexibles se empiezan a posicionar como la mejor opción para que el retorno a la normalidad no implique traumatismos que impacten el desempeño de los trabajadores y que, por el contrario, faciliten el equilibrio entre vida personal y laboral.
“Ahora las empresas deben apuntarle no sólo a la descentralización sino, también, al bienestar de sus empleados. La mezcla de estas dos herramientas asegurarán el éxito de la vuelta al trabajo”, concluyó Peñaloza.
