Consejos financieros en tiempos de recesión

Es importante sopesar cuáles son esos verdaderos efectos de esa recesión, qué tanto se trasmitan a la economía y cuánto tiempo puedan durar.

Foto: Invest in Bogota
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Son cada vez más los factores que evidencian que Estados Unidos entra a un proceso de recesión técnica que, sin duda, tendrá efectos en el grueso de la economía mundial, incluso cuando países como Colombia tengan pronósticos positivos en materia de crecimiento del PIB. Vea más noticias de consejos de finanzas personales.

Con esto de base, es importante sopesar cuáles son esos verdaderos efectos de esa recesión, qué tanto se trasmitan a la economía y cuánto tiempo puedan durar.

Tener clara la información financiera y saber qué mecanismos utilizar para solventar un tanto los efectos de la recesión es importante.

Un primer gran consejo tiene en cuenta que se hagan los gastos estrictamente necesarios. El ahorro, en tiempos de recesión, es clave para tener un colchón holgado en caso de experimentar vientos muy fuertes en el corto y mediano plazo.

Hacer un presupuesto juicioso es entonces fundamental para entender cuáles gastos son básicos y necesarios y cuáles pueden obviarse a espera de un mejor entorno económico.

Más consejos

Un segundo consejo importante es que toda aquella deuda que se tenga en tasa de interés variable debería ser saldada siempre y cuando se tenga la posibilidad de hacer el pago.

En caso de no saber cuáles son esas deudas, la entidad crediticia tiene la obligación de informar cuáles son y cuáles son las alzas de las tasas, así como el punto de referencia que se toma para encarecer esa deuda.

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Adicionalmente, es clave maximizar el ahorro. Los planes por gasto para compra de vehículo, por ejemplo, son solamente una buena idea si el ratio de incertidumbre financiera es baja: trabajo estable, que el pago de las cuotas no demande un porcentaje significativo del ingreso o el ahorro, entre otros.

Al tiempo que planes como las vacaciones pueden esperar, o encontrar opciones más económicas a las presupuestadas.

De otro lado, siempre va a ser fructífero que que se busquen nuevas opciones de ingresos. Esto es: un trabajo extra en tiempo libre o vender bienes que no sean necesarios. En ese caso, el dinero que llegue extra deberá hacer parte de un ahorro productivo: CDT, algún fondo de inversión colectiva, entre otros.

Y, finalmente, es clave que no se adquieran nuevas deudas en moneda dura, entiéndase estas como el dólar estadounidense, la libra o incluso el euro. Cualquiera deuda que se adquiera en esas divisas va a encarecerse a medida que se mantenga la devaluación de monedas como el peso colombiano.

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