Joe Biden, presidente de Estados Unidos, perdonó el jueves a miles de convictos por posesión de marihuana mediante una orden ejecutiva.
El indulto, que hizo parte de sus promesas en campaña, se da a un mes de que se celebren las elecciones legislativas de mitad de mandato.
“Nadie debería estar en la cárcel solo por usar o poseer marihuana”, afirmó el mandatario.
“Enviar a personas a prisión por posesión de marihuana ha cambiado demasiadas vidas y ha encarcelado a personas por conductas que muchos estados ya no prohíben”, añadió Biden.
De acuerdo con el presidente estadounidense, los antecedentes penales por posesión de marihuana también “han impuesto barreras innecesarias al empleo, la vivienda y las oportunidades educativas”.
“Y mientras que las personas blancas, negras y marrones consumen marihuana a tasas similares, las personas negras y marrones han sido arrestadas, procesadas y condenadas a tasas desproporcionadas”, agregó.
Así las cosas, anunció los tres pasos que tomó para “poner fin a este enfoque fallido”.
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En primer lugar, el mandatario anunció el “indulto de todos los delitos federales anteriores de simple posesión de marihuana”.
Afirmó que ordenó al fiscal general que desarrolle un proceso administrativo para la emisión de “certificados de indulto a personas elegibles”.
Al explicar que las condenas previas por posesión de marihuana pueden ser un impedimento para conseguir trabajo o vivienda, entre otros, este indulto les ayudará “a aliviar las consecuencias colaterales derivadas de estas condenas”.
Según las estimaciones, habría un promedio de 6.500 personas que están condenadas por normas federales sobre la marihuana.
Como segundo paso, Joe Biden instó a todos los gobernadores “a que hagan lo mismo con respecto a los delitos estatales”.
“Así como nadie debería estar en una prisión federal únicamente por la posesión de marihuana, nadie debería estar en una cárcel local o prisión estatal por ese motivo tampoco”, indicó.
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En tercer y último lugar, le solicitó al secretario de Salud y Servicios Humanos y al fiscal general que inicien el proceso administrativo para “revisar rápidamente cómo se clasifica la marihuana en virtud de la ley federal”.
