Gerente del Metro pide actualización de estudios del río Medellín tras superar emergencia

Durante el cierre del tramo, el Metro habilitó un plan de contingencia con buses que conectaron las estaciones Poblado y Aguacatala.

Compártelo en:

El gerente del Metro de Medellín, Tomás Elejalde Escobar, luego de una semana de trabajo tras la emergencia que afectó la infraestructura férrea en el tramo Poblado–Aguacatala, pidió actualizaciones de estudios del río Medellín.

“Por un lado, celebramos que el sistema ya funciona normalmente y en condiciones seguras, pero lamentamos profundamente el fallecimiento de Julián Andrés, trabajador vinculado a un contratista del Metro, y seguimos acompañando al otro colaborador que continúa hospitalizado tras sufrir varias cirugías. Su estado es estable, pero crítico”, dijo el directivo.

Elejalde destacó que la emergencia, que paralizó la operación entre ambas estaciones, puso a prueba la capacidad de reacción de la empresa y de todas las instituciones involucradas. “Fue una semana compleja, pero se demostró la capacidad de coordinación interinstitucional. Reaccionamos con todo nuestro personal operativo, de mantenimiento y administrativo. Todos estuvieron en sus puestos cumpliendo con su deber”.

Durante el cierre del tramo, el Metro habilitó un plan de contingencia con buses que conectaron las estaciones Poblado y Aguacatala, transporte que, según el gerente, movilizó “entre 35.000 y 40.000 personas al día, lo equivalente a un estadio lleno”. Los viajes se ofrecieron sin costo adicional para los usuarios.

Cooperación institucional

El gerente explicó que la recuperación del tramo se logró dos días antes de lo previsto, gracias al compromiso de múltiples entidades: EPM, la Universidad Nacional, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá y las secretarías de Infraestructura del Distrito y la Gobernación de Antioquia.

“Nos coordinamos para evaluar el daño, diseñar la solución e implementarla rápidamente. Hubo una disposición extraordinaria de recursos y, afortunadamente, el clima también nos favoreció”, detalló.

Actualmente, el tránsito de los trenes es completamente normal y los protocolos de seguridad fueron verificados al 100 %. “Se hicieron mediciones topográficas, se probaron las cargas estáticas y dinámicas, se soldaron los rieles y se validó la catenaria. Todo cumplió con las tolerancias exigidas: se permitió un asentamiento máximo de 5 mm, pero solo registramos entre uno y dos milímetros. Es decir, el terreno está estable”, aseguró Elejalde.

Recomendado: El programa bandera de Petro para vías terciarias apenas lleva 10 % de avance en tres años: ¿qué hay detrás?

El origen del daño y los puntos críticos

El gerente explicó que el punto afectado no estaba dentro de las alertas identificadas en los estudios de riesgo de 2019 y 2020, realizados por la Universidad Nacional y entregados al Metro por el Área Metropolitana.

“En esos años se identificaron 17 puntos de riesgo a lo largo de los 15 kilómetros de la línea A del Metro. Todos fueron intervenidos en los últimos cinco años con una inversión de entre $21.000 y $32.000 millones. Este punto, sin embargo, no estaba dentro de las alertas, lo que demuestra que el río Medellín es dinámico y que los estudios deben actualizarse constantemente”, explicó.

Elejalde recalcó que la afectación se originó por la erosión en una de las márgenes del río, y reiteró la necesidad de una intervención integral del cauce, más allá de las acciones puntuales del Metro. “El río tiene cerca de 89 puntos críticos en toda su extensión, aunque no todos afectan el sistema férreo. Pero el riesgo es real para otras infraestructuras, por eso insistimos en que debe existir una gestión conjunta liderada por la autoridad ambiental”, agregó.

Próximos pasos y monitoreo permanente

Aunque la operación ya es completamente normal, el Metro seguirá realizando labores de mantenimiento y restitución de herramientas en la zona afectada. “Puede que los usuarios vean personal trabajando, pero es parte de la restauración final. El Área Metropolitana continúa interviniendo el lecho del río con obras definitivas de estabilización”, explicó Elejalde.

Finalmente, el gerente reiteró que el sistema ferroviario es seguro y cuenta con tecnología que detiene automáticamente los trenes ante cualquier anomalía. “Si un riel llegara a romperse, la señal que transmite la información de velocidad se interrumpe de inmediato, y el tren se detiene. Esa es una garantía de seguridad para todos nuestros usuarios”, concluyó.