El Comité Técnico de BRC Standard & Poor’s ratificó en su revisión periódica la calificación del Banco Agrario de Colombia para su deuda de largo plazo en AAA (Triple A), y la de corto plazo en BRC 1+ (Uno más), debido a su buen desempeño financiero.
La calificación AAA es la más alta categoría de riesgo existente para la deuda de largo plazo, y BRC 1+ representa la categoría más alta entre los grados de inversión e indica que la probabilidad de repago oportuno de capital e intereses es sumamente alta.
Además de tener en cuenta el potencial respaldo patrimonial del Gobierno Nacional, la calificadora destacó la mejora en los indicadores de solvencia del banco durante el año pasado.
Lo anterior como resultado de la capitalización de utilidades del ejercicio de 2016, “considerando que el 80 % de estas se emplearon para aumentar la reserva legal y fortalecer de esta forma el patrimonio del banco, lo que a su vez mejoró el perfil de riesgo en cuanto a capital”, señaló el banco agrario en un comunicado.
Así mismo, BRC Standard & Poor’s indicó que la capacidad de generación de utilidad de la entidad sigue siendo una fortaleza y ponderó positivamente en la calificación de corto plazo la estabilidad de la estructura de fondeo del banco, la cual se encuentra representada principalmente por créditos de redescuento del Fondo para el Financiamiento del Sector Agropecuario (Finagro) y por el recaudo de depósitos judiciales.
De la misma forma, la calificadora destacó en su informe que el banco cuenta con herramientas y políticas para la gestión de los diferentes riesgos a los que se enfrenta dentro de su operación.
En el último año, el banco actualizó los mapas de riesgos de sus 27 procesos; implementó el sistema para administración de riesgo de corrupción; estableció una metodología para la medición del apetito al riesgo de crédito; incorporó un esquema de límites de concentración respecto a las posiciones en deuda privada y actualizó la metodología para medir el valor en riesgo en los portafolios de inversiones.
Para la ratificación de la calificación también se tuvo en cuenta que durante 2017 avanzó con la asesoría de la firma canadiense Desjardins, en la masificación de la metodología de perfilamiento del cliente, para lograr mayor agilidad y efectividad. Colocó producción una herramienta tecnológica que permite apoyar el proceso de originación y análisis de crédito desde las oficinas, por medio de una valoración oportuna y acertada de la intención de crédito, reduciendo el número de negaciones de crédito y unificando criterios de análisis.
Por último, la calificadora afirmó que, en línea con el uso de nuevas tecnologías, para mejorar los índices de derivación transaccional y descongestión de oficinas, el banco puso a disposición de sus clientes la nueva versión del canal de Banca Virtual.