Jorge Iván González, director del Departamento Nacional de Planeación (DNP), habló sobre la Estrategia Nacional de Financiamiento Climático en el Primer Congreso Camacol Verde Sostenibilidad en Construcción.
En el evento aclaró que no profundizaría en el Plan Nacional de Desarrollo que fue aprobado por el Congreso de la República, pero sí dijo que le parece el mejor que se ha hecho en el país por su consistencia ya que requirió de la aceptación y unión de todos los sectores políticos gracias a sus cuatro estrategias.
Por otro lado, mencionó que Colombia es capaz de definir grandes proyectos estratégicos sostenibles y por ello Valora Analitik habló a profundidad con él para conocer más sobre este tema, sostenibilidad y empresas que van por el camino verde.
Esto fue lo que respondió González en entrevista.
¿Qué tanto Colombia puede sacar adelante proyectos sostenibles?
“Colombia tiene la capacidad financiera para proyectos, lo que no tiene es la decisión institucional de articular proyectos, con el ejemplo de las Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Colombia podría decir que de ahora en adelante se van a movilizar todas de tal manera que ningún río se vuelva a contaminar.
Ese proyecto puede costar $21.000 millones, nosotros tenemos la plata porque el Plan de Desarrollo tiene un presupuesto de $1.145 billones, pero no tenemos un orden institucional suficientemente fuerte para que el país priorice ese tipo de proyectos porque tendría que dejar de hacer otras cosas y por querer hacer un montón de cositas no definimos proyectos sostenibles estratégicos”.
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¿Qué falta para llegar a esa visión según el DNP?
“Yo creo que lo primero es hablando duro, planeación ha dicho estos días que el lenguaje es un primer paso y cambiarlo para modificar la acción de instituciones y empresas que desean ser sostenibles.
Nosotros estamos haciendo un gran esfuerzo, nos presentaron 800 proyectos y los vamos a integrar del PND al Plan Plurianual de inversiones. Ya hicimos un avance porque en el gobierno Duque teníamos 1.700 y los bajamos a 800 pero sigue siendo una cifra alta”.
¿Cómo el DNP aplicará la interacción sostenible entre el campo y la ciudad?
Lo primero es redefinir la ruralidad, no establecer una frontera radical entre lo urbano y rural sino mirar la relación entre estos como un continuo, y ya se ha ido avanzando, pero no se ha incorporado en la consciencia de la gente esa continuidad, es decir, la ruralidad se define por menor cantidad de habitantes y distancia, entre menos gente viva allí y esté más lejos es más rural.
No se puede separar a Bogotá de Sumapaz o de Chingaza, por eso se debe ruralizar la conciencia urbana, es decir que cuando un joven abra la llave se acuerde de Sumapaz para entender que las ciudades son posibles gracias a los páramos y por lo tanto hay que conservarlos, pero no aislarlos.
¿Cómo le explicaría a la gente que no conoce la transición energética qué es el concepto?
La transición energética es todo, desde la producción hasta el consumo para reducir la dependencia de carbón, petróleo, el consumo de gases de efecto invernadero, es decir castigar el carro particular, mejorar la recolección de basuras para que el 90 % se pueda tratar y reutilizar.
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También es mejorar el consumo limpio, que en todas las nuevas construcciones haya paneles solares, de hecho, todas las casas deberían tener paneles solares, proteger los ríos, pero es un proceso muy lento.
¿Cómo el DNP apoya a las empresas para realizar la transición energética?
Lo que está haciendo el Departamento Nacional de Planeación es pensar en trabajar juntos, segundo se planea con el Ministerio de Hacienda una estrategia para lograr financiar activos ambientales con la línea del discurso internacional del presidente Gustavo Petro.
Colombia tiene unos activos ambientales muy fuertes y al decirle a la humanidad ayúdenos, no sigamos deforestando y páguenos por no hacerlo; entonces al cambiar la deuda pública con banca multilateral por ser eje ambiental se verán beneficiadas las empresas.
¿Y cómo los ayuda el aumento del impuesto del 6 %?
Ese impuesto a energías alternativas fue propuesto porque hay muchas dificultades con las consultas previas y comunidades ya que allí los excedentes de empresas de energía no las tienen en cuenta.
Es decir, sale beneficiada la empresa al montar su planta e iniciar sus procesos, pero afecta las tierras y ambiente de comunidades, por ello con este aumento del 1 % al 6 % lo que se busca es beneficiar a las comunidades.
En la Guajira puede ayudar al desarrollo de la comunidad y el dialogo entre ambas partes será más amable. La otra tarifa que se discutió mucho fue la sobretasa del predial para financiar el transporte masivo, pero finalmente no se aceptó en el PND.
