En alocución presidencial y Consejo de Ministros televisado, el presidente Gustavo Petro lanzó fuertes críticas contra su gabinete, advirtió de una crisis fiscal si no se aprueba una nueva ley de financiamiento y anunció su intención de restringir las inversiones de los fondos de pensiones en el exterior.
Durante el Consejo de Ministros televisado, Petro aseguró que varios de sus ministros lo han “traicionado” y no han cumplido con el programa de gobierno para el cual fue elegido en 2022. “No voy a pasar mi último año de gobierno con funcionarios que no respeten el mandato popular”, dijo, abriendo la puerta a un nuevo remezón ministerial.
Se refirió puntualmente al exministro de Educación, Alejandro Gaviria: “También me traicionó, pero ya es de poca monta porque, creo, la mayoría de mis ministros y ministras me ha traicionado en este gobierno”, dijo.
El presupuesto de 2026 y las pensiones
En el plano económico, el ministro Germán Ávila presentó una proyección presupuestal para 2026 de $551,6 billones —un aumento del 8 % frente a 2025—, pero Petro rechazó firmarla por considerar que no estaba alineada con su plan de gobierno. Exigió mayor inversión social y reiteró que, sin una nueva ley de financiamiento (reforma tributaria), el país enfrentaría una quiebra fiscal. “Si no hay ingresos suficientes, la financiación se llama deuda”, sentenció.
El presidente también se refirió al crecimiento de los gastos de funcionamiento, proyectados en $364,6 billones para 2026, con un aumento significativo en las transferencias obligatorias del Sistema General de Participaciones (SGP), que pasarán de $36,7 billones en 2018 a $88,3 billones en 2026.
Uno de los anuncios más contundentes fue su pedido al ministro de Hacienda, Germán Ávila, para que derogue el decreto que permite a las administradoras de fondos de pensiones (AFP) invertir en el extranjero.
“Si se llevan los ahorros de los trabajadores, ¿qué se va a invertir en Colombia?”, cuestionó Petro, insistiendo en que esos recursos deben permanecer en el país para dinamizar la economía.
En materia de salud, el presidente lanzó graves señalamientos contra el grupo empresarial Keralty, dueño de la EPS Sanitas.
Afirmó que su propietario habría financiado campañas políticas en Colombia con dineros extranjeros, lo cual está prohibido por la ley. “El dueño de Keralty es un criminal en Colombia. Debe irse. Así me toque hablar con el rey de España”, dijo, y solicitó a la fiscal general, Luz Adriana Camargo, abrir una investigación penal. Cabe mencionar que Keralty ya anunció medidas legales frente a las acusaciones de Petro.
Petro también desestimó el reciente informe de la Contraloría General sobre la deuda de las EPS, que la entidad cifró en $32,9 billones. Según el mandatario, la cifra real superaría los $100 billones. Defendió además las intervenciones estatales a algunas EPS, asegurando que han reducido en $707.000 millones las deudas con hospitales y clínicas, mientras que las EPS no intervenidas habrían duplicado sus obligaciones. “¿Qué es esto, si no es un robo?”, preguntó.