El Gobierno Nacional confirmó que está estudiando un grupo de alternativas para liquidar el megaproyecto Autopistas del Caribe de más de $4 billones.
Se trata de una iniciativa privada que fue contratada en 2021, durante la administración del presidente Iván Duque, pero que no ha podido comenzar su fase de construcción debido a la imposibilidad de cobrar un peaje y de instalar uno adicional en el corredor.
Esta situación bloqueó al concesionario para conseguir su cierre financiero y, por ende, no ha podido arrancar las obras en la vía alterna entre Cartagena y Barranquilla, cuya vocación principal es el transporte de carga.

De hecho, la situación llevó a Autopistas del Caribe a instaurar un tribunal de arbitramento internacional, por cuenta de que no se le ha dado viabilidad al megaproyecto.
¿Por qué se estudia liquidar el megaproyecto Autopistas del Caribe de más de $4 billones?
Y aunque las partes se han sentado en decenas de ocasiones, buscando una salida para cobrar el peaje de Turbaco e instalar el de Arroyo de Piedra, esto no ha llegado a buen término y todo apuntaría a que el contrato sería terminado anticipadamente.
Según el vicepresidente ejecutivo de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Roberto Gamaliel Uparela, el Gobierno ya está “explorando alternativas con el concesionario para la terminación de este contrato”.
Así lo dijo este miércoles en un debate en el Congreso, en el cual abrió la puerta a liquidar el megaproyecto Autopistas del Caribe de más de $4 billones.
Además, señaló que el concesionario -conformado por Grupo Ortiz, H+Era y KMA Construcciones- “ya puso sobre la mesa su voluntad de estudiar el caso y llegar a una terminación de mutuo acuerdo en el seno del tribunal que cursa trámite”.
El funcionario reconoció que se han “tenido muchísimas dificultades para que la estructura tarifaria pueda implementarse, particularmente por temas como el peaje de Turbaco”.
Se trata de una estación a las afueras de Cartagena, que no ha podido cobrarse para las categorías 1 y 2, debido a que las poblaciones cercanas a la misma afirman no querer pagar.
De hecho, las autoridades les han planteado que solo cancelen $1.500 por cada paso y reciban otros beneficios, pero todos han sido rechazados por los comités anti-peajes, que aseguran que el fin de sus protestas apuntan a que el peaje sea completamente desmontado.