Con el objetivo de reactivar el proceso de formulación de los lineamientos ambientales para el ordenamiento de la Sabana y Bogotá, se llevó a cabo una reunión entre el Ministerio de Ambiente, la Alcaldía de Bogotá y la Gobernación de Cundinamarca.
El encuentro fue convocado en cumplimiento de una decisión del Tribunal Administrativo de Cundinamarca, que ordenó reiniciar dicho proceso.
La reunión, que fue calificada como ‘cordial y productiva’ por las partes, contó con la participación de representantes del Distrito, entre ellos funcionarios de las secretarías de Ambiente, Jurídica, Gobierno y Planeación. El espacio fue liderado por la Dirección de Ordenamiento Territorial del Ministerio de Ambiente.
Durante el encuentro, el Distrito informó que presentó una propuesta metodológica para avanzar de manera conjunta en la construcción de los nuevos lineamientos ambientales que regirán tanto para la Sabana como para la ciudad de Bogotá.
“Presentamos una propuesta metodológica que nos ayuda a construir coordinadamente estos lineamientos ambientales para toda la Sabana de Bogotá y para la ciudad”, dijo la secretaria de Planeación, Úrsula Ablanque.
Esta propuesta fue entregada formalmente al Ministerio y busca establecer una hoja de ruta clara que permita trabajar de forma coordinada y articulada.
Según explicó la secretaria de Ambiente de Bogotá, el objetivo es construir una visión común que garantice tanto la protección de los ecosistemas estratégicos del territorio —fundamentales para la regulación hídrica— como el desarrollo equilibrado de la ciudad y la región.
La funcionaria resaltó que, a pesar de las diferencias existentes, se identificaron importantes coincidencias en cuanto a la visión general del ordenamiento ambiental.
Las partes acordaron continuar con mesas de trabajo técnicas y reuniones periódicas para construir de manera mancomunada los lineamientos, en cumplimiento de la decisión judicial y en beneficio del equilibrio entre sostenibilidad ambiental y desarrollo urbano.
El choque para definir los lineamientos de la Sabana
El proceso de formulación de los lineamientos ambientales para el ordenamiento de la Sabana y Bogotá ha sido motivo de controversia entre el Gobierno Nacional y las autoridades locales. Mientras el Ejecutivo defiende esta iniciativa como una herramienta para controlar el crecimiento urbano, la Alcaldía de Bogotá, la Gobernación de Cundinamarca y otros actores han manifestado preocupación por las implicaciones que tendría sobre proyectos de infraestructura y el desarrollo económico regional.
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, ha señalado la falta de concertación con el Distrito como uno de los principales problemas del proceso.
Según ha advertido, la ambigüedad en temas como la delimitación de humedales podría afectar a 138 barrios y poner en riesgo obras clave para la movilidad y la conectividad de la ciudad, como las líneas 1 y 2 del Metro, la Avenida Longitudinal de Occidente (ALO), el intercambiador de la Calle 80, la ampliación de la Calle 63 hacia el Aeropuerto El Dorado y la Avenida Ciudad de Cali, entre otras.
Ante estas tensiones, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca ordenó reiniciar el proceso de formulación de los lineamientos, lo que dio paso al encuentro reciente entre el Ministerio de Ambiente, el Distrito y la Gobernación.
