Desde este 1 de noviembre empiezan a regir en Colombia los impuestos saludables que, según el gobierno del presidente Gustavo Petro, buscan mejorar las condiciones de salud de los ciudadanos y quitarle peso a los costos por atención en salud.
Pero han sido varios los reparos que se han dado a conocer en el marco del establecimiento de estos gravámenes, sobre todo por los costos que deberán asumir productores o vendedores y su eventual transmisión al bolsillo de los colombianos.
Según el gobierno, los impuestos saludables en Colombia no se van a convertir en una carga para los hogares sobre la base de que no representan una proporción significativa de la canasta.
De acuerdo con datos de este gobierno, para los hogares de clase media estos impuestos le pegan a cerca del 2,4 %, lo mismo ocurre con los hogares de bajos ingresos.
Desde Fenalco, donde reúnen a los comerciantes del país, el llamado de atención se centra en el hecho de que de alguna manera los nuevos impuestos van a pasar factura en momentos en los que la preocupación es seguir bajándole presión a la inflación.
¿Qué va a pasar con los impuestos saludables en Colombia?
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, aseguró que hay productos que sí son de consumo recurrente entre los ciudadanos, por lo que la decisión va a terminar siendo contraproducente.
“Los hogares colombianos, en particular los de estratos populares, tendrán que pagar un sobreprecio en más de 20 productos, lo que generará automáticamente un impacto en el costo de la canasta familiar. Es necesario destacar que el 95 % de las tiendas se localizan en estratos 1, 2 y 3”, dijo el dirigente.
Al tiempo que se recuerda que, en el marco del Congreso, se propuso poner en espera la entrada en vigor de esos impuestos saludables en Colombia para que no se diera una afectación tan fuerte al bolsillo de los colombianos.
Finalmente, más allá de lo que puedan representar para la inflación, los impuestos saludables podrían, según Fenalco, afectar las finanzas de los tenderos por tener que asumir los costos extra a cuenta de la disposición de la reforma tributaria que se aprobó el año pasado.
Cálculos de Fenalco, citados por La W, dejan ver que, de los ingresos totales de una tienda o panadería, el 16 % llega por las bebidas azucaradas, el 16,8 % proviene de ultraprocesados.
Lista de comida chatarra que tendrá más impuestos en Colombia
- Embutidos y productos similares de carne, despojos, sangre o de insectos; preparaciones alimenticias a base de estos productos, excepto salchichón, mortadela y butifarra
- Las demás preparaciones y conservas de carne, despojos, sangre o de insectos
- Artículos de confitería sin cacao incluido el chocolate blanco
- Productos a base de cereales obtenidos por inflado o tostado (por ejemplo: hojuelas o copos de maíz); cereales (excepto el maíz) en grano o en forma de copos u otro grano trabajado
- Confituras, jaleas y mermeladas
- Purés y pastas de frutas u otros frutos obtenidos por cocción, incluso con adición de azúcar u otro edulcorante
- Productos de panadería, pastelería o galletería, pero se excluye a los productores con ingresos brutos de menos de 10.000 UVT
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