La inflación de Brasil subió 0,87 % en agosto, la más alta del mes desde el 2000, de acuerdo con los datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) publicados este jueves.
El indicador acumula máximos de 5,67 % en lo que va de 2021 y de 9,68 % en los últimos 12 meses. En agosto de 2020, la variación mensual fue de 0,24 %, según el reporte del IBGE. (Ver más de Internacional).
Ocho de los nueve grupos de productos y servicios que hacen parte de la medición subieron en agosto, con énfasis en el transporte, que registró el mayor incremento de precios.
Combustibles presionan inflación
Los combustibles, en general, presentaron un incremento del 1,46 %. La gasolina subió un 2,8 %, el etanol 4,5 %, el gas vehicular 2,06 % y el gasoil 1,79 %. En lo que va de 2021, la gasolina acumula un incremento del 31,09 %, el etanol el 40,75 % y el diésel el 28,02 %.
André Filipe Guedes Almeida, analista del IBGE, apuntó que el precio de la gasolina está influenciado por los ajustes aplicados en las refinerías de acuerdo con la política de precios de Petrobras.
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“El dólar, los precios en el mercado internacional y la subida de los biocombustibles son factores que influyen en los costes, que acaban repercutiendo en el consumidor final”, dijo Guedes.
Otras incidencias en la inflación de Brasil
Los precios de los vehículos subieron 1,16 %; los de los alimentos y bebidas, 1,39 %; los de la vivienda, 0,68 %, y los del gas entre 2,7 % y 2,4 %, según su presentación. En contraste, los costos de la salud y el cuidado personal retrocedieron 0,04 %.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) aumentó un 0,88 % en agosto, por debajo del resultado de julio, que había sido del 1,02 %. En el año, el indicador acumula un incremento del 5,94 % y, en 12 meses, del 10,42 %.
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