Las mujeres están redefiniendo la inversión en América Latina con foco en construir patrimonio con propósito

En el caso de Sura Investments, el 42 % de los clientes inversionistas son mujeres, una proporción que refleja el dinamismo de este segmento.

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Durante décadas, el mundo de las inversiones se percibió como un espacio predominantemente masculino. Sin embargo, esta mirada está cambiando.

Cada vez más mujeres participan activamente en decisiones financieras estratégicas, fortalecen su autonomía económica y proyectan un legado patrimonial para sus familias y comunidades. Aunque su presencia todavía es menor dentro del universo total de inversionistas en la región, la participación femenina avanza con fuerza.

En el caso de Sura Investments, el 42 % de los clientes inversionistas son mujeres, una proporción que refleja el dinamismo de este segmento y su creciente interés por consolidar y gestionar patrimonio. Este crecimiento responde a motivaciones personales —desde el deseo de independencia hasta el bienestar familiar—, junto con un entorno financiero que empieza a ofrecer soluciones más cercanas, claras y accesibles.

Un perfil que combina cautela y visión de largo plazo

De acuerdo con cifras de Sura Investments, en general, las mujeres inversionistas adoptan perfiles más conservadores que los hombres. De hecho, el 29 % se clasifica como conservadora, mientras que el 43 % como perfil moderado y solo un 8 % agresivo. Privilegian herramientas que resguarden su patrimonio, incluso cuando esto supone retornos más moderados en el corto plazo.

Ante eso, la compañía explicó que esta perspectiva suele estar determinada por las experiencias vividas en el entorno familiar: muchas desarrollan el hábito de ahorrar desde pequeñas y, al invertir, buscan la opinión de personas de confianza —padres, hijos o parejas—, aunque la decisión final suele ser propia.

La diversificación también está presente en su comportamiento financiero. Es frecuente que inviertan simultáneamente entre uno y siete productos, con preferencia por fondos voluntarios de pensión, seguros con componente de ahorro, instrumentos transados en corredoras de bolsa o fondos inmobiliarios, siendo el más utilizado los Fondos Mutuos (82 %). En esa elección, factores como la transparencia, la liquidez, la reputación de la entidad y la disponibilidad de asesoría especializada, son decisivos.

“Hoy, más que nunca, invertir es también un acto de autonomía para las mujeres: una manera de tomar decisiones conscientes sobre su patrimonio, su futuro y su impacto en el entorno. La industria tiene la responsabilidad de acompañarlas con herramientas claras, cercanas y alineadas con sus metas de vida”, señaló Lina Madrid, head de infraestructura en Sura Investments.

Mujeres con poder de decisión

Según Madrid, el mayor “apetito” por invertir se observa a partir de los 35 años, etapa en la que muchas mujeres ya cuentan con ingresos más consolidados o con hábitos de ahorro bien desarrollados. Sin embargo, las generaciones más jóvenes comienzan a marcar una diferencia: muestran mayor apertura al riesgo, interés por tendencias digitales y afinidad con productos sostenibles o temáticos.

“Más allá del retorno, para muchas mujeres invertir es asegurar estabilidad y construir un futuro con mayor bienestar. Por eso valoran la claridad en la información, la asesoría frecuente y la posibilidad de operar de manera ágil”, enfatizó la head de infraestructura.

Una transformación en marcha

Adicionalmente, mencionó que las mujeres no han estado ajenas al interés por las inversiones. Lo que históricamente las ha limitado son desafíos estructurales, sesgos culturales y una industria que, durante años, comunicó con un lenguaje distante. Aun así, el cambio ya está en curso: cada vez más mujeres invierten con propósito, visión de largo plazo y una comprensión integral del impacto de sus decisiones.

“Que la participación femenina en productos de inversión siga siendo menor refleja la importancia de crear una industria más incluyente y cercana. En Sura Investments trabajamos para ofrecer asesoría clara y acompañamiento continuo, de manera que más mujeres se sientan seguras y con las herramientas necesarias para tomar decisiones financieras alineadas con sus metas”, añadió Lina Madrid.

Esta tendencia coincide con hallazgos del CFA Institute, que muestran que el 39 % de las mujeres toma decisiones de carrera antes de los 22 años. Esa anticipación influye en su relación con el dinero, generando mayor disposición para ahorrar e invertir desde etapas tempranas.

Su aproximación al riesgo no es de rechazo, sino de análisis: evalúan diversas variables, consideran el impacto de cada decisión y muestran especial interés por estrategias que integren rentabilidad y sostenibilidad, como fondos temáticos ESG, inversiones en educación, salud o activos inmobiliarios sostenibles.

La diversidad también tiene efectos medibles. Distintos estudios indican que los equipos de inversión con mayor diversidad de género pueden mejorar su rendimiento hasta en 38,9 puntos básicos anuales, reafirmando la importancia de integrar distintas perspectivas en los procesos de análisis y toma de decisiones.

“Cuando una mujer fortalece su autonomía financiera, amplía sus oportunidades y genera efectos positivos en quienes la rodean. En Sura Investments mantenemos el compromiso de acompañarlas con confianza, conocimiento y soluciones que les permitan tomar decisiones de inversión alineadas con lo que valoran y con el futuro que quieren construir”, concluyó Lina Madrid, head de infraestructura en Sura Investments.