El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que enviará una propuesta de reforma de las pensiones al Congreso poco después de asumir el cargo el 1 de enero, según una entrevista concedida a la emisora ​​Band TV.
Aunque los detalles precisos de la reforma planificada de pensiones aún son escasos, el equipo de Bolsonaro ha prometido últimamente un cambio gradual hacia algún tipo de sistema con un pilar de capitalización y tal vez hacia un sistema de contribución definida.
Se considera que la reforma gradual ofrece eventualmente el mismo resultado de una reforma más profunda.
Bolsonaro también dijo que recortarÃa los impuestos, pero de una manera responsable.
Igualmente se comprometió a no reactivar un impuesto sobre las transacciones. Sus polÃticas ayudarán a aumentar el empleo e impulsar la base tributaria, dijo.
Más tarde, un asistente de Bolsonaro, Bia Kicis, dijo que el presidente electo lanzará un plan de seguridad pública para reducir los delitos violentos, otorgar más poder a la policÃa, facilitar los controles de armas y reducir de 18 a 16 años la edad en que los jóvenes brasileños pueden ser procesados.
Ventas petroleras
El nuevo gobierno del presidente electo Jair Bolsonaro planea, además, impulsar la venta de depósitos domésticos de crudo a grandes compañÃas petroleras, dijo a Bloomberg el asesor económico de Bolsonaro, Luciano de Castro.
Aunque no tiene una invitación oficial para unirse al gobierno, de Castro dijo que trabajará a tiempo completo en el programa de energÃa.
El plan incluirÃa subastas a mediados de 2019 y los ingresos por ventas podrÃan alcanzar los 100 mil millones de reales.
Un proyecto de ley que autoriza las ventas podrÃa ser votado por el Senado esta semana. La legislación también podrÃa eliminar la obligación de la empresa petrolera estatal Petrobras de desarrollar la región costa afuera por sà misma.
Con respecto al sector energético, de Castro dijo que a pesar de que la empresa estatal de electricidad Eletrobras vendió cuatro proveedores de energÃa regionales, no logró vender dos distribuidores de energÃa. Los problemas podrÃan esperar, dijo el asesor.
En general, Bolsonaro y su equipo buscan vender activos de energÃa para aumentar el efectivo y, potencialmente, reducir el déficit fiscal o invertir en otro lugar. La decisión estarÃa en lÃnea con algunos de sus planes pro mercado.
La privatización en el sector energético también podrÃa ayudar a mejorar la eficiencia y simplificar los problemas financieros, ayudando a la actividad económica en general. El costo polÃtico de tales movimientos no está claro, y la privatización no ha sido tradicionalmente popular.
(Reporte especial de CEEMarketWatch para Valora Analitik)