Europa atraviesa una de las olas de calor más intensas de los últimos años, con temperaturas que en algunas zonas superan los 40 grados centígrados que han producido incendios forestales y alertas máximas por golpe de calor.
Los expertos advierten que este fenómeno, cada vez más frecuente, es consecuencia directa del cambio climático y representa un riesgo grave para la salud pública, los ecosistemas y la infraestructura.
¿Qué está ocurriendo?
La ola de calor es provocada por una “cúpula de calor”: un sistema de alta presión que atrapa aire caliente sobre una región durante varios días, impidiendo que se disipe. Esta situación, amplificada por la desertificación del norte de África y los efectos globales del cambio climático, ha generado temperaturas extremas desde el sur de Europa hasta Escandinavia.
Según la Agencia Estatal de Meteorología de España (AEMET) y la Organización Meteorológica Mundial, esta es la primera gran ola de calor del verano europeo y ya muestra una intensidad inusitada para el mes de junio y comienzos de julio, especialmente por su duración y su extensión territorial.
Récords de temperatura por país
España alcanzó un máximo de 46 °C en El Granado (Huelva), la cifra más alta en lo que va del año. Sevilla, Córdoba y Badajoz también superaron los 44 °C, lo que obligó a cancelar actividades escolares y eventos públicos.
Portugal se encuentra en alerta roja en más de la mitad de sus regiones. Lisboa registró 43 °C, mientras que, en el interior, localidades como Beja y Évora rozaron los 45 °C. El Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA) ha recomendado no realizar trabajos al aire libre entre las 11 a. m. y las 5 p. m.
En Francia, París y Lyon activaron la alerta roja. Más de 1.300 escuelas fueron cerradas por orden del Ministerio de Educación, mientras que sitios turísticos como la Torre Eiffel limitaron el acceso. El país también reportó temperaturas cercanas a 41 °C en el sur, y picos de 39 °C en regiones habitualmente templadas como Bretaña.
Italia ha confirmado tres muertes relacionadas con el calor en Palermo, Roma y Milán. Autoridades locales prohibieron trabajar en exteriores en sectores como la construcción y la agricultura durante las horas de mayor radiación. En ciudades del sur como Catania y Nápoles se superaron los 43 °C.
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En Reino Unido, el Met Office registró su día más caluroso del año con 33,6 °C en Kent y emitió alertas ámbar en Londres, Midlands y Gales. Aunque menos intensa que en el sur del continente, la ola de calor ha generado aumentos de consultas hospitalarias por deshidratación.
En Grecia, se reportan grandes incendios forestales en las afueras de Atenas y en la isla de Quíos. Cientos de personas fueron evacuadas y las autoridades cerraron sitios arqueológicos como el Partenón en horas de la tarde. Las temperaturas en la capital superaron los 42 °C.
Incendios por la ola de calor
El calor ha creado las condiciones ideales para la propagación de incendios forestales en varios países:
- En España, la provincia de Salamanca fue escenario de cuatro focos activos simultáneamente: en Fuentes de Béjar, Malpartida, Vitigudino y El Payo. La Junta de Castilla y León declaró riesgo alto o extremo en casi toda la región.
- En Turquía, más de 50.000 personas fueron evacuadas en la región de Esmirna (Izmir), donde los incendios forestales, exacerbados por el viento cálido y seco, ya han destruido más de 10.000 hectáreas de bosque. Es uno de los peores fuegos desde 2021.
- En Francia y Portugal, los bomberos enfrentan docenas de focos activos, y en algunos departamentos se han desplegado refuerzos del ejército para apoyar la extinción.
Europa es el continente que se calienta más rápido del mundo, a un ritmo del doble del promedio mundial, según el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la UE, con olas de calor extremas que comienzan a principios de año y persisten durante más tiempo.
«Lo que es excepcional… pero no inédito es la época del año. ahora se están viendo episodios de calor extremo «que normalmente veríamos más adelante en el verano», dijo la portavoz de la Organización Meteorológica Mundial, Clare Nullis.
Según los servicios meteorológicos de España, Francia e Italia, la ola de calor podría empezar a ceder entre el jueves 4 y el sábado 6 de julio. Sin embargo, las temperaturas seguirán siendo altas durante todo el fin de semana, especialmente en el sur de Europa, por lo que el riesgo de incendios y golpes de calor seguirá vigente.