Pfizer anunció que ha reducido a la mitad su producción inicial de dosis de su vacuna contra el coronavirus por problemas en la cadena de suministros, según ha avanzado este viernes el diario The Wall Street Journal.
La farmacéutica tenía previsto producir este año –lo que queda de él– 100 millones de dosis. Sin embargo, ha reducido el objetivo hasta las 50 millones de dosis.
Según recoge el diario estadounidense citando a un portavoz de la compañía, «ampliar la escala de la cadena de suministro de material ha tardado más de lo esperado».
Además de estos problemas logísticos, ‘The Wall Street Journal’ cita una fuente anónima directamente involucrada en el desarrollo de la vacuna que afirma que «algunos de los primeros lotes no cumplieron con los estándares” de calidad, lo que ha provocado retrasos en la producción.
Pfizer está a la espera de que las autoridades reguladoras de EE. UU. y de la Unión Europea le concedan la autorización de emergencia para empezar a distribuir el inyectable, cosa que podría producirse este mismo mes.
De hecho, la Agencia Europea del Medicamento prevé pronunciarse sobre este permiso antes del 29 de diciembre. Los reguladores del Reino Unido han sido los primeros en autorizar el uso de la vacuna de Pfizer-BioNTech para su uso en ese país.
(Con información de El Periódico)
—